La psicóloga, columnista, conferencista y escritora chilena María del Pilar Sordo Martínez (1965) estudió Psicología en la Universidad Diego Portales (Santiago de Chile). Desarrolla su labor profesional en su país de origen, “y en todo el mundo hispano, realizando charlas en diversos sectores, tanto públicos como privados. Colabora en programas de radio y televisión y es columnista en diferentes medios escritos y portales de Internet.
Es creadora y directora de la Fundación Cancervida, es madrina de la Fundación para niños con Síndrome de Tourette, en la Argentina. Entre sus publicaciones que han logrado mucha difusión están: ¡Viva la diferencia! (2005), Con el Coco en el diván (2007), No quiero crecer (2009), Lecciones de seducción (2010) y Bienvenido dolor (2012). Cf La casa del Libro.
¿QUÉ DA SENTIDO A TU VIDA? (ENTREVISTA COMPLETA 1h 20´ 42”)
Para Pilar Sordo, “la vida es un viaje en continua remodelación desde la pausa, la honestidad y la observación. Permitirnos ser y reconocer cómo estamos es un desafío en una sociedad en la que se positiviza todo demasiado, y a su vez, un requisito fundamental para aumentar los niveles de conciencia.” Ella dice al auditorio: “estoy en un muy buen momento de mi vida, muy en paz, muy deseosa de todo lo que siento que se me va a venir encima o que me va a llegar. Así que esta es la mujer que tienen al frente, a la que le pueden preguntar lo que quieran.”
Gracias a la iniciativa educativa del BBVA (España), compartimos con fines únicamente educativos y de formación permanente, partes de su diálogo con un variado auditorio, por más de una hora tratando temas, que nos podrían ser útiles para nuestra reflexión personal y comunitaria, como el sentido de la vida, la psicología espiritual, el autoengaño, el exceso de futuro, la angustia, la ansiedad, la melancolía, la tristeza, la depresión, el miedo, el coraje, el respeto, la autoridad, el testimonio, la felicidad, habilidades blandas, ser líder, relaciones humanas, y temas sobre psicología educativa que pueden ser de utilidad para nuestra vida y el día a día en las aulas.
En esta publicación compartimos los enlaces del video completo y el momento más destacado, así como partes del diálogo que recomendamos leer íntegramente en el enlace que indicamos al final de este artículo. Es nuestro propósito que esta publicación sea una invitación a seguir entusiasmados en nuestra formación permanente, conociendo los aportes y la experiencia de especialistas cercanos al mundo educativo. Hacemos presente que los corchetes indican las partes que por motivos de espacio, -y no por otro motivo-, hemos cortado, las letras en negritas y cursivas también son nuestras.
JOSÉ LUIS: … ¿Cuál es para ti el sentido de la vida?
PILAR SORDO: “[…] Yo creo que una de las cosas que deja la pandemia es que la gente se está preguntando muchas cosas que antes de la pandemia no se preguntaba y que tienen que ver con el sentido de la vida, con el «para qué». […] adquirimos «conciencia de muerte» y eso nos da «conciencia de vida», en forma automática, y por lo tanto me hace valorar la vida. […] los psicólogos, […] vamos a tener que girar y empezar a estudiar algo que en la facultad no nos enseñaron, que es lo que tiene que ver con la psicología espiritual, que es agregar a la psicología como ciencia el tema del propósito de la vida. […] porque quiere una vida distinta. Ahora, para eso se requiere mucho coraje, pero tiene que ver con entender que el sentido de la vida es descubrir tu propósito, que puede cambiar también. Mi propósito… […] Entonces, creo que estamos todos invitados a descubrir nuestro propósito en este instante, en este momento de la vida, que a lo mejor no es el mismo propósito por el cual me eduqué. […] lo más importante es no traicionarse y no mentirse. Creo que eso se paga muy caro en esta humanidad hoy. Muy, muy caro. El autoengaño tiene alto precio, a diferencia de lo que podía haber sido hace años, donde se podía convivir con el autoengaño sin demasiado costo, ni psicológico, ni emocional, ni mental, digamos. Entonces, creo que el propósito de la vida hay que buscarlo. Hay que entender cómo queremos y por qué queremos ser recordados. Creo que llegó el momento de pensar en el legado. ¿Qué vamos a dejar? Incluso en términos de la educación con nuestros hijos hoy día es súper clave, porque la respuesta es lo que me determina la forma en que los voy a educar. Me parece que es un tema central. ¿Qué vamos a dejar? Me parece que hoy día ese sentido de trascendencia pasa a ser relevante.”
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ANDREA: ¿Qué es para ti lo espiritual?
PILAR SORDO: “La espiritualidad para mí tiene que ver con el sentido de trascendencia de las cosas, tiene que ver con el para qué. […] la espiritualidad trasciende lo religioso. […] si yo trabajo la espiritualidad, le voy a encontrar un sentido, le voy a encontrar un mensaje, algo que se me presenta frente a la vida y que, en mi cabeza, con mi educación y el formato con el que fui educada, no lo logro explicar. […] Yo diría que tiene más que ver con la intuición, con ese pálpito de sentir algo que aparentemente no tiene explicación concreta, física o tangible. […] A mí me seduce mucho ver cómo en la medicina, por ejemplo, se ha ido incluyendo dentro incluso de los tratamientos a ciertas enfermedades, la medicina alternativa, […] algo que antes era impensado y se sentía casi como una especie de «brujería» en el mal sentido de la palabra. […] Creo que el reencontrarnos con la espiritualidad como una realidad o forma de conocimiento es reencontrarnos con nosotros mismos. Es volver al ser y dejar de mirar solo el tener y el hacer, que son las grandes dos fuentes que nos enseñaron como causas de identidad.
CLAUDIA: Me gustaría saber cómo podemos vencer nuestros miedos del día a día, para poder vivir más tranquilos y al final deshacernos de las expectativas y el qué dirán de los demás.
PILAR SORDO: “Lo primero de lo que yo creo que tenemos que tener capacidad es de darnos cuenta de cómo estamos o de qué pensamos frente a ese día a día. ¿Cómo descubro eso? Descubriendo dos enfermedades que yo definí en la penúltima investigación, que son el exceso de futuro y el exceso de pasado. El exceso de futuro es la imposibilidad absoluta de estar en el presente y de ir un paso más adelante de donde estás. […] tu cabeza está en el futuro y al perder contacto con el presente te dispersas. La ansiedad siempre se va a vivir en movimiento, a diferencia de la angustia que se vive en absoluta rigidez corporal. Para salir de la angustia hay que moverse, porque eso es lo que hace que el pensamiento negativo o futurista se te desbloquee. Y para salir de la ansiedad hay que respirar y mantenerse quieta, para volver al presente. Ambas dos son acompañadas por el miedo. Las dos te generan o van… Uno transita con el miedo en ese proceso. El exceso de pasado tiende a generar dos síntomas que son la melancolía y la tristeza, que es la gente que supone que antes era más feliz que hoy. ahí es de donde surge también la depresión, […] Entonces, la única posibilidad de transitar el día en armonía es estando en el presente la mayor cantidad de tiempo posible. Y ahí la lentitud es una habilidad que te sirve mucho como recurso, […] que te permite poder estar en el aquí y el ahora. […] El cómo estás define lo que te va a pasar. El cómo eres define lo que te va a pasar. La vida no es de ninguna manera objetiva. La vida es de acuerdo a como yo la veo y a como la leo, el cómo yo expando esa conciencia de que mi mundo interno determina y que no voy a permitir, que eso es algo muy clave, que nadie me quite la paz. […] aprendiendo de las experiencias que puedan ser desafiantes durante el día. Porque al final de lo único que se trata la vida es de tener conciencia. Teniendo conciencia todo, todo, todo, todo es mucho más fácil. Cuando uno funciona en piloto automático es cuando se entrampa y la gran mayoría de la humanidad está en ese piloto.”
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MARÍA: Te quería preguntar si consideras que la intuición es una fuente de conocimiento tan válida y tan fiable como puede ser la razón, por ejemplo.
PILAR SORDO: “Lo primero que se me vino a la cabeza era preguntarte: «¿Y la razón es una buena fuente de conocimiento?». Sí, sí. Yo considero que es una fuente de información fundamental, la intuición. Creo que tiene menos distorsiones, incluso, y menos errores. Nos equivocamos menos cuando creemos en nosotros, cuando existe como la certeza de que lo que yo siento, pienso e intuyo está en un mismo nivel de congruencia. Creo que el gran tema con respecto a ese punto es tener silencio interno y que no haya ruido. Yo siempre digo que una decisión está bien tomada cuando es silenciosa, cuando no hay nada que te jode. […] Una buena decisión siempre se va a dar en silencio, lo cual no quiere decir que no tengas miedo, porque las decisiones importantes de la vida todas se toman con miedo. […] Es un segundo de coraje que es como llamar y decir: «Se terminó». […] Ese segundo de coraje… Generalmente, la gente a mí me plantea dos excusas para no tomarlo. La primera es: «No es el momento, […] Y la segunda excusa que me dan es: «Es que tengo miedo. […] Si yo les pregunto a ustedes qué decisión importante de sus vidas, de las importantes, han tomado sin miedo, me van a decir que ninguna. Todas han sido un vértigo. Ahora, ¿por qué las toman? Porque están convencidos de que al otro lado del miedo está la plenitud para ustedes. […] Ahora, ¿qué me hace tomarla? La certeza absoluta de que al otro lado está mi paz interna. Entonces, sí, yo creo que la intuición… […] está teniendo mucho poder y está siendo creída, que es lo que a mí más me gusta. Me parece que está siendo una fuente de información importante que acompaña a la razón y a las emociones y al cuerpo. Me parece que ni siquiera está separado de eso. En realidad, habla todo junto al mismo tiempo.”
PILAR: … hoy estamos más preocupados que nunca por la educación de nuestros hijos. Sin embargo, les hacemos una agenda de actividades que les ocupan la mayoría de su tiempo. ¿Cómo podemos equilibrar esto?
PILAR SORDO: “Es que el tema de la educación es… Mira, si yo quisiera responder esa pregunta en una sola frase, te diría que hoy día nuestros hijos tienen todo menos a nosotros y es justo lo que necesitan. Hoy día el millonario para mí es el que tiene tiempo y el que elige qué hacer con él. Y a mí me pasa que veo a una generación de papás y mamás muy asustados educando a sus hijos. Yo siempre digo que somos la única generación que le tuvo miedo a sus padres y que hoy día les tiene miedo a los hijos. Y educamos como desde ahí, como desde ese susto. Y eso nos hace muy culposos, porque, además, como hay que trabajar mucho para satisfacer sus necesidades, o por lo menos las que nosotras suponemos que son necesidades, los dejamos muy solos, cosa que tampoco siento que sea muy distinto de lo que yo viví. […] esta sensación de la valoración que yo siento que es una habilidad parental que hoy día hay que recuperar mucho, que es el valor de la imperfección. […] la otra cosa que me parece que es importante entender es que hoy la autoridad se gana, a diferencia de lo que pasaba en mi generación. Yo a mi papá lo obedecía porque era mi papá, solo por eso, y porque además había una cuota importante de miedo. […] Y eso es algo que los papás y mamás modernos no han entendido. […] Hoy es importante que los hijos nos crean y que lo que yo diga sea lo que haga. […] De alguna manera hay que volver a recuperar ciertos rituales familiares de comunicación y de unión. El juego de naipes o juegos de mesa que nos saquen de la tecnología, que los saquen del iPad, del celular, de la televisión, de la pantalla.
Que se apague todo. […] para poder decir lo que sienten, son niños que están protegidos automáticamente frente a la droga, frente a la delincuencia, frente a cualquier otro tipo de entre comillas trastorno social al cual pudieran, entre comillas, también caer. La familia es una unidad protectora. […] Implica el desarrollo de un vínculo, implica el desarrollo de la conversación, implica trabajo. Hoy día, sobre todo en las familias de mayores recursos económicos, a mí me impresiona cómo los papás y las mamás trabajan todo el día para pagar un «staff» de profesionales que se hagan cargo de sus hijos en las cosas que ellos tendrían que hacer. Trabajan para pagar al psicólogo, trabajan para pagar al fonoaudiólogo, trabajan para el terapeuta ocupacional, para que vaya a clases de piano, para que además haga clases de gimnasia o de deporte […] Ese papá o esa mamá tendría que sentarse a conversar en el comedor y decirle: «Hijo, ¿tú eres feliz? ¿De verdad yo como mamá lo estoy haciendo bien? ¿Te hace falta algo?». Ese tipo de conversaciones son necesarias porque es otro espacio de conciencia. […] Hoy hay infinitas preocupaciones, porque hay infinitos cuestionamientos de esos niños que necesitan ser, […] Lo que pasa es que hay papás y mamás que no quieren hacer ese trabajo. Es como la frase de Einstein que me encanta, la frase de locura, que dice: «Ser loco es querer obtener resultados distintos haciendo lo mismo». […] No puedo hacer lo mismo que hacía mi mamá porque no me va a servir. Insisto, porque la autoridad se gana hoy, a diferencia de lo que pasaba antes. Y perderla no cuesta nada. No cuesta nada porque el mundo de hoy es tremendamente incongruente. […] Yo les dije un millón de veces a mi mamá y a mi papá que eran los peores de todos, y que los papás de mis amigas eran increíbles y ellos no. Y yo no me morí y ella tampoco, ni siquiera está en el recuerdo de la familia, nos reímos, de hecho, con eso. Pero creo que hay que trabajar la congruencia y entender que tienen de todo menos a nosotros.”
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ESTHER: … En tu libro «Educar para sentir», hablas de que te gustaría erradicar una serie de conceptos que son habilidades blandas. ¿Por qué son tan importantes para ti?
PILAR SORDO: “No me gusta nada el concepto de habilidades blandas. Yo creo que las palabras generan realidades y creo que hablar de habilidades blandas es suponer que las duras sí son importantes y las blandas parece que se derritieran o son inconsistentes. Y hoy día ocurre que la gente es contratada en lugares de trabajo por tener habilidades técnicas o llamadas duras y es despedida por no tener las llamas blandas, porque hoy día lo que me hace permanecer en un trabajo son mis habilidades llamadas «blandas», que yo les cambié el nombre en el libro de «Educar para sentir, sentir para educar» por competencias emocionales. Y esas competencias emocionales son las que no solo me hacen permanecer en un trabajo hoy, sino que además me permiten ascender en ese trabajo. […] son mi capacidad para escuchar, mi capacidad para resolver conflictos, mi empatía o capacidad para ponerme en el lugar del otro, mi capacidad para sonreír. […] hoy un buen líder es un líder que tenga, ante cualquier cosa, la honestidad emocional. […] tiene que ver con la autenticidad. El líder tiene la obligación de seducir y no existe en este momento… Antes se podía seducir desde el conocimiento. […] Porque no había acceso a eso. Hoy día yo tengo posibilidades de acceder a todo tipo de información sin estudiar nada. […] entendiendo que para llegar a ser ese buen líder casi prácticamente necesita solo habilidades mal llamadas «blandas», porque las técnicas no le van a ayudar. […] Todas esas habilidades primero se aprenden en casa. En la facultad no te las enseñan jamás. Y son habilidades blandas, que son las que al final te sostienen un desarrollo laboral o profesional. […] no es lo mismo un grupo de trabajo que un equipo. […] Y eso hoy se necesita educar. […] y estamos como estamos un poquito por eso, porque esa habilidad humana de cercanía, de mirar a los ojos, de decir «gracias», de aprender a decir «por favor», de cosas mínimas, hoy día parece casi exclusiva de algunas personas, cuando debería ser casi lo más común. […]”
ROSA: … quería preguntarte por qué dices que ser feliz no es un derecho, sino una obligación.
PILAR SORDO: “Porque, si no, ¿a qué vinimos? Yo creo que vinimos a este plano a tres cosas, siempre lo planteo, que es aprender a amar, a dejar huella y a ser felices. Pero el ser feliz es un concepto que ha estado muy teñido de muchas otras cosas que a mi juicio lo desdibujan de lo que es. A nosotros se nos convenció de que ser feliz tenía que ver con estar contentos. […] eso nos mete en un vértigo social muy peligroso, que tiene que ver con la obligación de estar contento. Y la felicidad no tiene nada que ver con la alegría. La alegría es maravillosa, pero es una emoción que es transitoria, a no ser que yo la trabaje para ser permanente, fundamentalmente desde la gratitud. Pero es una emoción transitoria. Yo no puedo estar contenta todo el tiempo, pero sí puedo ser feliz todo el tiempo. Yo puedo estar triste y ser feliz. […] La felicidad tiene mucho más que ver con el silencio que con el ruido. Tiene más que ver con la paz, con la serenidad, con el poder respirar profundo y sentir que está todo en armonía, cuerpo, mente, cabeza. Y eso se trabaja. […] es una decisión, es algo que yo decido todos los días. […] La decisión de ser feliz es algo que se toma instante por instante. Me refiero a cuando uno está viviendo situaciones difíciles, […] creo que la vida es una decisión completa de búsqueda de paz, de trabajo, de armonía, de estar centrado conscientemente en lo que tienes, en el conectar con la alegría en forma permanente, en dejar atrás mandatos de sufrimiento, en esta sensación de que todo lo que vale es porque costó demasiado, porque lo que fácil viene, fácil se va. Estamos llenos de cosas que nos impiden tomar contacto con esa decisión.”
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ELENA: … Cuando pensamos en personas inteligentes, solemos pensar en una persona que es más seria o que no pierde la compostura, y sin embargo a una persona que es más positiva se la ve como si fuese una persona más inmadura. ¿Tú qué crees de esto?
PILAR SORDO: “[…] Ver gente tan contenta tiende a molestarnos, lo cual es superdifícil de asumir como sociedad, pero reconocer que nos da rabia ver gente contenta es una realidad. Y eso tiene que ver con la sobreintelectualización, con suponer que el ceño bien fruncido, bien marcado aquí… Yo supongo que esa persona es estudiosa. Y si es malhumorado y lee mucho… […] Yo siempre he creído que la inteligencia abunda en la gente que se ríe. Porque es la gente que trabajó el sentido del humor, que para mí ha sido una salvaguarda tremendamente importante de mi desarrollo mental y emocional, […] Y eso implica también desarrollar muchas conductas relacionadas con la gratitud. El humor tiene mucho que ver con la gratitud, con el agradecer el momento, […] en realidad, es muestra de mucha sabiduría, mucho más que la seriedad, la contractura y la complejización de las situaciones.”
EVA: … Quería preguntarte si crees que realmente todo tiene algo positivo. Bueno, y en caso de que sea así, si eso es lo que los psicólogos llamáis psicología positiva.
PILAR SORDO: “[…] yo creo que todo tiene algo positivo. Todo tiene algo potencialmente aprendible y rescatable de cualquier situación. Eso primero. Segundo, sí, la estructura o el entrenamiento para aprender a ver eso positivo a nivel mental y emocional es lo que hoy día se llama psicología positiva. Pero siento que eso también, como todo fenómeno en la vida, se ha ido distorsionando hasta el punto de llegar a un positivismo tóxico, […] está todo el tiempo impulsando a esta sensación de todo se puede. Y yo creo que sí, que es verdad que todo se puede, pero no siempre. […] Hoy existe como una moda del no sentir, […] eso tiene mucho que ver con esta tendencia que se ha ido generando de positivizar todo demasiado […] en la vida hay que aprender a parar para seguir. Es como aprender a descansar, pero nunca renunciar al sueño. Pero ese descanso es válido. […] Ahora, como soy positiva, sé que ese mal va a pasar y que es transitorio. Ahí me sirve ser positiva, porque me da el indicador de que es transitorio […] Lo que tengo que tener claro es que, si no puedo yo con eso, tengo que pedir ayuda. Y, si puedo con eso, me tengo que permitir el «break» para después continuar. Pero ese «break», a mí me parece que es un derecho básico. […].”
La transcripción completa de este diálogo y los videos, que consideramos importante leer y visualizar, lo encontrará en este enlace: “DECIR ESTOY TRISTE O ESTOY CANSADA ES UN DERECHO BÁSICO”
Esta publicación corresponde a SERIE DE VIDEOS: APRENDAMOS JUNTOS, PARA SUMAR POR LA EDUCACIÓN
“La vida no es de una sola forma; es cómo la miramos. Por lo tanto, si cambiamos nuestra manera de mirar esta experiencia, podremos descubrir todos los aprendizajes y misterios que nos trae a cada uno.” (VELVET)
NOTA DE REDACCIÓN: Las ideas y opiniones expresadas en este diálogo, no son necesariamente las de la Web del Maestro CMF, y no comprometen en modo alguno sus políticas de formación permanente y revalorización de la tarea docente. Sugerimos a nuestros lectores conocer con mayor amplitud la identidad de la conferenciante, para tener mayores elementos de juicio y la pertinencia que ayude a su reflexión desde su realidad educativa.
REDACCIÓN WEB DEL MAESTRO CMF