Maestros al servicio de la educación

[Ernesto González]: “… es mala consejera”

El artículo de hoy, previo a los puntos suspensivos, para algunos conocedores de música latina, caribeña de habla hispana, podrán acertar que lo que falta es “La soledad…”.
Llegar a este estatus social, resulta en muchos casos un elemento contradictorio entre los que arriban a ella por diversos factores y que suelen sentirse bien, otros simplemente se asustan, ya que para algunos es la antesala ¿de morir, de ser olvidado?

Irse a los extremos, blanco o negro, nunca es pertinente, ya que pueden existir etapas de soledad a lo largo de la vida, por ejemplo, parejas que se separan por diversos motivos, conllevando a crisis emocionales, estados depresivos, pero también constituye un punto de partida para uno conocerse a sí mismo, elevar la autoestima, impulsar la creatividad, de modo tal que permita facilitar el proceso de comprender, amar y respetar a una pareja el día de mañana o por el contrario vivir una vida sola, considerando que es mucho mejor y disfrutar su restantes años de vida, con visitas ocasionales o sistemática de su familia.

Sin embargo, pudiera resultar preocupante cuando la persona no sabe o puede convivir con la soledad, por lo que necesita estar rodeada de alguien todo el tiempo, llamar a alguien, sentir a alguien cerca, optando por no huirle a la posibilidad de tener lazos afectivos o aislarse del mundo para evitar problemas.

Si bien, para las personas adultas – consideradas de la tercera edad (65 o más años) – resulta más propensas a entrar o pasar a una etapa de “soledad”, como es el caso particular de la jubilación (con más de 30 a 50 años de experiencia), donde la persona se supone que deje ser activa, intelectual y laboralmente, más si a lo anterior se suma, que “hay que darle espacio a las personas más jóvenes”, pudiera resultar perjudicial, hasta cierto punto.

¿Qué hacer? Cada persona, es responsable de la toma de sus propias decisiones, que de considerar u optar por la soledad, pudiera “refugiarse” en actividades como leer, practicar deporte, escribir, como actividades que son mucho más enriquecedores si se aprenden de manera individual, permitiendo que ese aprendizaje nos imprima seguridad e individualismo, lo cual se logra cuando se disfruta de la soledad.

Pero, ¿realmente se está llegar a estar solo? No, sería mi respuesta, para ello están los amigos, los hijos, los nietos, los vecinos, y ¿para acercarnos? Diría que el lado amable de las redes sociales, las cuales permiten acortar distancia, verse en tiempos reales, amén de los husos horarios; el apoyo económico y de salud, si fuese el caso – mediante las remesas familiares[1] con destino preferentemente en nuestra región a países de América latina, tan común y no necesariamente de hoy en día – que permiten por poco que sea lo que puedan favorecer a la persona que lo necesita, o en todo caso depende de lo que recibe por la condición de jubilado, por la institución correspondiente.

En fin, una condición compleja, ante un mundo que envejece cada día más, sin embargo, no debemos olvidar que, si nuestros padres nos dieron la oportunidad de formarnos y educarnos, pues al final de la vida de ellos, nosotros tenemos la obligación de cuidarlos. La mejor terapia para vencer la soledad es la integración familiar.

  • [1] En el primer trimestre de 2021 las remesas recibidas de nicaragüenses residentes en el exterior ascendieron $500,4 millones, monto que supera en 18% al reportado en igual período de 2020.

NOTA DE REDACCIÓN: La Web del Maestro CMF publica los textos originales de su autor, no necesariamente coincide con lo expuesto en el tema, no se hace responsable de las opiniones expresadas, y no promociona ningún producto, servicio, marca o empresa. Sugerimos a nuestros lectores conocer la identidad de la fuente o de su autor o autores, para tener mayores elementos de juicio y la pertinencia a su realidad educativa.


Autor:
Ernesto Gonzalez , ciudadano nicaragüense, nacido en Cuba.
Experiencia laboral:
Lic. en Ciencias Pedagógicas con mención en química. 40 años de experiencia como docente en los niveles de educación media y superior; cursos de posgrado propios de la especialidad y en pedagogía; autor de libros de texto para la enseñanza media tanto en ciencias naturales, como sociales. Articulista para los periódicos La Prensa, El Nuevo Diario (nicaragüenses 2000-2008), actualmente para el periódico El Siglo 21 guatemalteco.
Correo electrónico:
[email protected]
Cuenta de twitter: @gonzlez_ernesto

.



Comparte este artículo
Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

También puede leer:





Se desactivó la función de seleccionar y copiar en esta página.