El Profesor argentino Hernán Aldana estudió Licenciatura en Ciencias Biológicas en la Facultad de Ciencias Exactas y Naturales y obtuvo su Doctorado en Ciencias Biológicas, en la Universidad de Buenos Aires (Argentina). Desde el año 2008 hasta el 2018 fue Decano de la Facultad de Ciencias Exactas y Naturales y de Ciencias de la Salud de la Universidad de Belgrano (Argentina). En la actualidad es profesor a cargo en la Universidad Nacional de la Matanza y en la Universidad de Morón en Argentina en carreras como Medicina y Kinesiología y Fisiatría. Profesor Titular de Histología – Embriología en la Carrera de Medicina, facultad de Cs. de la Salud en la Universidad de Morón.
Desde hace algunos años viene realizando cursos, seminarios y conferencias sobre la capacitación de docentes y alumnos en temáticas de Neuroeducación. Para el profesor Aldana “la comprensión de los mecanismos cerebrales que subyacen en el aprendizaje y la memoria, y los efectos de la genética, el medio ambiente, la emoción, y la edad en el aprendizaje podría transformar las estrategias educativas y permitirnos diseñar programas que optimicen el aprendizaje para las personas de todas las edades y de todas las necesidades. La Neurociencia […] puede ofrecer una cierta comprensión de cómo el cerebro aprende nueva información y procesa esta información durante toda la vida. En el presente y en el futuro, el conocimiento de cómo el cerebro se desarrolla y aprende tiene y tendrá un profundo impacto en la educación”. CEREBRO Y EDUCACIÓN
La “catástrofe educativa global”, generada por la pandemia del Covid 19, nos sorprendió en diversos niveles de preparación de práctica con la enseñanza virtual. Después del camino recorrido, con el cierre de las escuelas, se nos exigió y nos exige buscar y ensayar nuevos caminos educativos en nuestra tarea de acompañar a nuestros estudiantes en su formación académica con los nuevos recursos tecnológicos que nos permitan desarrollar las clases a distancia y hacerlas “interesantes”. Las herramientas digitales, para muchos de nuestros estudiantes, son manejadas con mucha familiaridad, facilidad y destreza. Sobre esta realidad, les recomendamos un artículo anterior, sobre los recursos y herramientas más usados por los profesores.
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Un buen número de profesores hemos asumido la continuidad del dictado a las clases por medio de la modalidad a distancia, virtuales o digitales. Y sabemos ahora, por esta experiencia, lo importante y fundamentales que son las TIC para enseñar en el Siglo XXI. Además, nos hemos dado cuenta (si acaso no lo habíamos notado antes), que nuestros estudiantes llamados “nativos digitales”, son (en un buen número) muy hábiles para jugar, pero no para aprender los contenidos académicos, y que las clases virtuales nos están exigiendo enseñar a nuestros estudiantes y padres de familia a aprender a regular los tiempos de aprendizaje de manera diferente al horario escolar tradicional.
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Nuestras clases, como las habíamos desarrollado por décadas, se trasladó -inesperadamente- del ambiente escolar de las aulas, el patio, los recesos, y convivencia, a la transmisión desde nuestros hogares, y con las herramientas que teníamos o que tuvimos que buscar. Esto nos creó, en algunos de nosotros, frustraciones, miedos, errores, … y mucha ansiedad, y de paso también cambió la forma de apoyar la educación de los padres de familia. Y aquí es donde se ha visto, la importancia de motivar y animar la creatividad docente desde la formación inicial. Se ha logrado, en no pocos países, superar el año académico 2020 con un cierto éxito, aunque en algunos aún queda por resolver la brecha digital y la conectividad universal. Ahora, ante el incierto regreso a las clases presenciales o su intermitencia, consideramos que sería bueno escuchar algunos consejos o ideas para mejorar el trabajo en las aulas virtuales, y conseguir perfeccionar nuestro desempeño cuando lleguen (al parecer) las clases híbridas, y lograr desarrollar el plan curricular de nuestros países.
Sabemos que las TIC han evolucionado mucho en estos últimos dos años, se ha inundado el mundo digital de nuevas herramientas digitales para la educación, y los webinars y los tutoriales se presentan como buenas alternativas para aprender a estar al día en este campo. En casi todas partes se vislumbra una educación con clases híbridas, como una alternativa muy buena para la educación pos pandemia, previa dotación de herramientas y una mejor conectividad para estudiantes y profesores.
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Por motivos únicamente educativos y de formación permanente, compartimos el enlace para visualizar el video de la charla del profesor Aldana colgada en YouTube por TEDxPuraVidaSalon, que seguramente podrá ser un buen muy buen recurso para quienes nos encontramos -a causa del cierre de las escuelas, por la emergencia sanitaria del Covid 19-, ante un reto de mejorar nuestra tarea en las aulas virtuales, con dieciocho ideas que cada uno tomará, mejorará o descartará, según su realidad.
PRESENCIA EN EL AULA VIRTUAL (16´ 41”)
El Profesor Aldana nos da algunas ideas y sugerencias para mejorar nuestra tarea en las “aulas virtuales, que seguramente cada uno aplicará según su realidad, y que aceptan el enriquecimiento que cada uno le pueda añadir, porque en educación la última palabra todavía no está dicha.
A modo de síntesis enumeramos los dieciocho consejos para optimizar nuestras aulas virtuales:
- La presentación del profesor y ver la cámara como si en “ese agujero” de la cámara están los estudiantes.
- La voz y la pronunciación deben ser claras.
- Los gestos son fundamentales.
- Es necesario tranquilizar los “cuerpos” de los estudiantes, con algo de humor: motivar.
- Es bueno sugerir la necesidad de ambientar el espacio de la casa que se ha elegido para recibir la clase virtual.
- Incentivar la participación corporal activa.
- Evidenciar que es importante la presencia y también la ausencia del estudiante.
- Sugerirles a tomar apuntes, que hagan dibujos, esquemas, …
- Despertar la curiosidad y el asombro.
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- Hacer el trabajo colaborativo en equipo, promover las tareas y evaluaciones juntos.
- No usar un solo canal. El “sorprendizaje”.
- Repensar los contenidos.
- Hacer notar lo importante, lo relevante en cada tema.
- Tenemos que aplicar la retroalimentación positiva continua en la virtualidad. Lo negativo siempre por comunicado por medio del chat personal.
- No es bueno que enseñemos con “sillas vacías”.
- No hay que hacer suposiciones de los materiales y los recursos con que cuentan los estudiantes.
- Pensemos que casi todos nos están viendo con celulares o móviles.
- Aprender la canción- si pensamos cantar- antes de improvisarla.
La educación a distancia nos está enseñando que podemos ahora dedicar más tiempo a nuestros estudiantes, “acompañando fuera de las clases de manera online el andamiento de las tareas”, -opina Paulo Vasconcellos, responsable de soporte pedagógico en Wormhole-, ya que “la educación virtual en vivo es más eficiente que el e-learning tradicional, porque habilita al profesor a “generar un vínculo más fuerte con los alumnos en vivo y direccionarlos a un mejor rendimiento”; además por ser las clases online en vivo “es más posible mantener la asistencia de los alumnos hasta el final del curso”. cf EL ROL DEL DOCENTE EN LA EDUCACIÓN VIRTUAL
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“Es importante recordar que el software educativo, como los libros de texto, es solo una herramienta en el proceso de aprendizaje. Ninguno puede ser un sustituto para profesores bien entrenados, liderazgo y para la implicación de los padres”. (Keith Krueger).
REDACCIÓN WEB DEL MAESTRO CMF