Nuestro saludo y agradecimiento, porque el Espíritu ha estado grande con nosotros y estamos alegres (cf Sal 126), al ver cómo cada día somos una comunidad más numerosa de hombres y mujeres que creemos que vale la pena ser educador(a), y que conociendo y aprovechando las redes y las nuevas tecnologías de comunicación, es posible encontrarnos y acompañarnos para vivir con mayor interés e ilusión esta hermosa vocación que “requiere dotes especiales de alma y de corazón, una preparación diligentísima y una facilidad constante para renovarse y adaptarse” (GE 05).
Consideramos que quienes seguimos o ingresan a la Web del Maestro CMF, sabemos que nuestra comunidad ha establecido y aceptado (desde su creación) que la pluralidad y la diversidad es una riqueza para la inclusión social y para el bien de la educación en las redes, que demanda una actitud permanente de humildad, de respeto, de escucha, de solicitud, de tolerancia y de diálogo. “Frente a un individualismo invasor que hace humanamente pobres y culturalmente estériles, es necesario humanizar la educación” (Papa Francisco 09/02/2017). Estamos llamados a ser mejores, por convicción, por vocación, y porque somos referentes para nuestros niños y jóvenes; conforme lo dijimos desde el inicio: «Cada vez que entremos aquí sabremos que estamos abriendo una puerta para la formación y capacitación personal, y que estamos construyendo puentes con los demás, y derribando los muros” (18/12/2015).
Con estas premisas, nos vemos en la fraternal obligación de recordar que, al expresar nuestra opinión, en los diferentes canales de nuestra Web, estamos en la imperiosa obligación de usar el vocabulario correcto, expresar el juicio reflexivo y honesto y demostrar la tolerancia debida; pues todo error gramatical, todo exabrupto y toda expresión agresiva, violenta e irresponsable, son contrarios a la auténtica misión educativa. “Para ello es de suma importancia conocer qué responsabilidades tenemos en la vida social. Porque lo que realicemos o dejemos de hacer redundará en beneficio o en perjuicio de nuestra propia vocación y de la calidad de vida de otros” (Claret Contigo, 15/06).
Hemos crecido como comunidad educativa digital, y “mensajes leemos, pero corazones no sabemos”, y hay enunciados que nos rehusamos a creer que sean de educadores, no sólo por los errores de ortografía y redacción impropios, sino también cargados de toxicidad. Somos conscientes de los beneficios y de las limitaciones que tiene la comunicación en el ciberespacio, y por eso, y en bien de nuestro objetivo de apoyar la formación permanente y revalorar la tarea docente, procederemos a eliminar (cuando lo juzguemos necesario, oportuno y eficaz), todo mensaje incorrecto, ya sea porque exterioriza un desafortunado enunciado, o porque usa un vocabulario que transgrede la auténtica libertad de expresión. En caso de gravedad, excluiremos de nuestra comunidad al infractor.
Con el afecto, el respeto y mi más sincera admiración, les animo a que cuidemos el tesoro de nuestra vocación docente que “llevamos en recipientes de barro” (2 Cor 4,7), sobre todo en esos momentos en que la tormenta arrecia fuerte, las crisis parecen apocalípticas y el horizonte se oscurece; con estas palabras de la Madre Teresa, maestra de escuela: “lo más importante no es lo que damos, sino el amor que ponemos al dar”.
WEB DEL MAESTRO CMF
Totalmente de acuerdo en la responsabilidad de comunicarnos con respeto hacia todos, además de la diversidad que por fortuna hay EN este grupo, hay un común denominador, somos profesores .
Muchas gracias por compartir tanto , sobre todo en estos momentos en que la distancia con los PEQUEÑOS nos lleva a diseñar nuevas formas de enseñanza, a descubrirnos capaces de lograrlo. Felicidades colegas y nuevamente mil gracias.
Excelente mensaje. Seguro cada perSona tiene su idea y pensar pero si se realiza Con reSpeto y fundamento, loS lectores Creceremos en Comunidad de Aprendizaje.
Gracias por Sus propuestas !!
Excelente comunicado. gracias por sus sugerencias y comentarios. tenemos la obligación de respetar nuestro entorno digital y agradecer por tanta bibliografía que nos proveen. saludos desde monterrey, méxico.