La UNESCO y la Organización Internacional del Trabajo (OIT) en 1994 estableció el 05 de octubre para celebrar el Día Mundial de los Docentes, con la finalidad y el objetivo de hacer más actual, visible y consciente una de las profesiones más valiosas dentro de la sociedad.
Su singular vocación y su inmensa capacidad creativa en el proceso enseñanza – aprendizaje de los estudiantes, de la mano con los padres de familia, durante el tiempo del cierre de las escuelas a causa del Covid 19, ha demostrado su peculiar capacidad y competencia para descubrir nuevas rutas educativas, demostrando que “enseñar con autonomía empodera a los docentes”.
JOHN LEGEND. DÍA INTERNACIONAL DEL MAESTRO 2022 (Original 0´ 56”)
Decía Rabindranath Tagore que “No es tarea fácil dirigir a hombres; empujarlos, en cambio, es muy sencillo”. Y la misión de los educadores es justamente el tutelar y ayudar a todas las personas a aprender a ser lo que son capaces de ser (cf Hesíodo). A reflexionar, pedir consejo y tomar la mejor decisión con responsabilidad. Por eso, en este Día Internacional del Docente, queremos agradecer a quienes “ayudando a los padres en el cumplimiento de su deber y en nombre de la comunidad humana, desempeñan la función de educar en las escuelas. Esta vocación requiere dotes especiales de alma y de corazón, una preparación cuidadosísima y una facilidad constante para renovarse y adaptarse” (GE, 05).
Publicación recomendada:
Federico Mayor: Es necesario tener siempre presente la distinción entre educación y capacitación
Ahora, más que ayer, hemos tenido que recurrir a la creatividad y reformular -en algunas partes- una mejor calidad en la formación inicial y su formación permanente, con “un sistema educativo que atraiga y retenga a un personal docente motivado, eficaz, con buena formación y en el que los hombres y las mujeres estén equitativamente representados; …”, y revalorada su tarea docente, no solo en la poesía y las bonitas palabras, sino con el respeto a su presencia en las aulas y en las escuelas, con una remuneración justa y digna, que le entusiasme a abrazar esa vocación, gusto, proclividad, preferencia, propensión, inclinación, afición, aptitud, … al llamado a colaborar con los padres en la tarea de educar a sus hijos, y consolidar la formación integral. Si bien la educación empieza por casa, la escuela es el espacio donde se visualiza lo aprendido en casa. Algunas veces dar clases se vuelve una tarea compleja para los docentes, debido a los diferentes ambientes familiares, por la indisciplina de los niños o porque no comprenden las reglas a seguir de una comunidad como la educativa. Y esto hace urgente el encontrar el camino educativo compartiendo el trabajo de educar, entre la familia y la escuela (cf Nancy Aspajo Aguilar).
Este 5 de octubre, desde la Web del Maestro CMF, agradecemos al maestro cuyo inevitable desgaste es como la semilla que muere para dar vida, y que solo lo llega a ver (con los años) en la vida de muchos de sus estudiantes egresados; su trabajo diario en las aulas, en los recesos, en las conversaciones personales, … es como el agua de la lluvia que no vuelve al cielo sin haber fecundado la tierra. Sobre todo (a pesar de las duras desconsideraciones sociales) siempre tendrá la intuición docente para acercarse a sus estudiantes más “difíciles, más débiles, más desfavorecidos”. Y allí están siempre “al pie del cañón”, en la primera línea y como lo dijo el Cardenal Bergoglio: “Cuando uno mira el desgaste de los docentes en un pacto educativo roto sin el apoyo de los padres, con sueldos mal pagos que los obligan a tener dos trabajos, con aulas más llenas de lo que sería necesario, entonces uno se da cuenta de que realmente allí hay algo que solucionar, hay una pobreza. Tenemos que reconocer ese trabajo cotidiano de estos hombres y mujeres que se desgastan en el aula en situaciones a veces insuficientes y precarias”. (Buenos Aires, 14/04/2010). ¡Gracias maestros!
Artículo recomendado:
Ante la nueva normalidad educativa, los profesores llegamos reinventados y actualizados
Esperamos, y no solo como sueños, quimeras, utopías y buenos deseos, sino como una exigencia social, el que se acabe -de una buena vez- “la insatisfacción causada por el descenso en la escala social, los bajos salarios, las difíciles condiciones de la enseñanza y el aprendizaje y la falta de perspectivas de carrera”, que ha desanimado a muchos o ha logrado que el ejercicio docente se realizado por profesores con deficiente formación pedagógica, conformistas e incapaces de creer en nuevos caminos de aprendizaje, instalados en su “librillo de maestrillo”, dispuestos a repetir lo que ordene el gobierno de turno, y a cumplir la transmisión de los conocimientos estipulados en los textos oficiales. Y aunque parecen ser los menos, se ha podido evidenciar que existen -en algunos lugares- durante las clases a distancia.
Artículo relacionado:
El escritor portugués José de Sousa Saramago, premio Nobel de literatura en 1998, considera que los maestros, por si solos no tienen condiciones para educar, algunas veces debido a que “la familia no educa, no sabe, no puede y entonces transfiere la obligación de la educación”, y otras porque lo sistemas educativos de sus países los “encorsetan” y apagaban cualquier entusiasmo por encontrar nuevos itinerario s educativos. Los maestros “hacen lo que pueden para educar, pero no pueden ya que la familia dimitió de su obligación. Por eso, al recordar a los docentes de todo el mundo, que se esforzaron -muchos hasta el sacrificio confidencial y silenciado por su humildad- durante la pandemia, y que ahora han tenido que regresar a las aulas con sistemas educativos obsoletos, con planificaciones elaboradas en los escritorios de las secretarias y ministerios de educación, y con la desconsideración social de siempre, luego de la pandemia, podemos decir, sin ningún temor a equivocarnos que una de las más grandes contribuciones a la humanidad, durante el cierre de las escuelas, ha sido la desarrollada por los profesores desde sus hogares, en condiciones y con recursos -muchas veces- limitados, comprados, prestados o hechos por ellos, sin preparación tecnológica digital previa -muchos de ellos- con mucha inventiva para organizar sus clases, y con una filantropía -si me permiten decirla- singular y única.
Entrevista recomendada:
Carmen Fernández Morante: La importancia de la formación inicial docente
Lamentablemente, -aún después del regreso a las clases presenciales-, y habiendo visto su gran tarea con la educación a distancia, en muchos países del mundo los profesores han vuelvo a trabajar en infraestructuras ruinosas o insuficientes; con niños mal alimentados, con aulas superpobladas, sin esperanza de ser respetados, escuchados y dialogados sus acuerdos laborales ni las contrataciones del sector educativo. Por eso, el previamente nombrado escritor Saramago nos dice que, “los auténticos héroes de nuestros tiempos son los maestros, que son humillados, despreciados, agredidos y que al día siguiente vuelven al lugar donde han sido humillados, despreciados y agredidos”. Cuánto deseamos que nuestros estudiantes, que ahora están en las aulas, lleguen a ser los líderes que revaloricen la tarea docente. ¡Sí se puede!
Publicación relacionada:
Ojalá que los logros de los nuevos itinerarios educativos, las sonrisas de nuestros estudiantes, la cercanía de tantos buenos padres de familia y colegas, ahora que hemos vuelto a una nueva normalidad educativa, nos motiven a todos los maestros del mundo, a poner mayor empeño en la preparación de las clases, la búsqueda del tiempo para la permanente actualización; a seguir aprendiendo de la experiencia de los demás; a estar convencido de la importancia de aprender el manejo las nuevas TIC y sus recursos; conocer, vigilar y usar debidamente nuestras emociones para tener relaciones humanas positivas;…, y sobre todo sentir que nuestra tarea de maestros no solo es para vivir, sino templar el alma para las dificultades de la vida (cf Pitágoras), porque en Educación la última palabra no está dicha. A esos educadores hoy, 5 de octubre del 2022, les queremos decir, desde la Web del Maestro CMF: ¡GRACIAS MAESTRO!
Nuestra mejor respuesta a este homenaje sugerido a los maestros, es reconocer no solo su contribución vital por medio de la educación y el desarrollo de nuestros futuros ciudadanos y líderes, sino también en revalorizar su tarea, porque sin unos buenos maestros, no pueden surgir aquellos que nos van a liderar en el futuro. Y como exhortó el Cardenal Bergoglio a los maestros argentinos: “`Salgan del encierro y vayan y anuncien este modo de vida´. Este modo de vida en que la luz es la que vence; este modo en que no se negocia la luz por un farolito así nomás que deja a su costado espacios de tiniebla. Anuncien este modo de vida en que la tiniebla no tiene lugar y luchen contra ese cansancio tan habitual que los caracteriza en su vocación para que cada chico y cada chica abra su corazón a la luz y no le tengan miedo a la luz, aunque les pueda costar algunas dificultades. [… para que nuestros niños y jóvenes] Caminen por la luz, no se dejen seducir por los mercaderes de las tinieblas; abran su corazón a la luz, aunque cueste. No se dejen encadenar por esas promesas que parecen de libertad y son de opresión; las promesas del gozo fatuo, las promesas de las tinieblas. Sigan adelante. El mundo es de ustedes. Vívanlo en la luz. Y vívanlo con alegría porque el que camina en la luz tiene un corazón alegre”. (22/04/2009)
“No tengan miedo de ensuciarse las manos, no tengan miedo, siempre y cuando ese ensuciarse las manos sea para atajar, para contener para hacer crecer el corazón y el alma de un chico que nos es confiada cada día”. (Jorge Bergoglio 27/04/2006).
REDACCIÓN WEB DEL MAESTRO CMF
