Bernabé Tierno: Amarse a sí mismo

“Amarse a sí mismo es la decisión mas importante que debe tomar todo ser humano a cada instante, en todas las etapas de su vida, tanto en la infancia como en la ancianidad. El problema radica en que aceptarse y amarse a sí mismo exige aprendizaje, nos lo han de enseñar desde la cuna y debemos seguir aprendiéndolo a lo largo de toda nuestra existencia.
La aceptación de si mismo está en constante interacción y retroalimentación por vasos comunicantes con la libertad, creatividad y actitudes dialogantes. Por la libertad accedemos a las experiencias personales que nos proporcionan autonomía y confianza en las propias capacidades, diseñando y provocando nuestro quehacer vital, libre de los dominios ajenos.

Aprendemos de nuestra propia experiencia personal. Mediante la creatividad proyectamos nuestra propia existencia como un quehacer irrepetible, repleto de sugerencias, posibilidades, inquietudes y esperanzas, libre de estereotipos, servilismos y esquemas acomodaticios y despersonalizantes. Por las actitudes dialogantes vamos madurando la capacidad de vivir nuestra vida como búsqueda constante de encuentros humanos enriquecedores.

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El entendimiento y comprensión de los demás y el ser capaces de ver las cosas desde su punto de vista nos conduce a la perfección madurativa humana; la entrega a los demás, el amor y la aceptación del otro, que sólo es posible cuando uno se acepta y se quiere a sí mismo.

CREE EN TI Y QUIÉRETE (03´ 39”)

LA AUTOACEPTACIÓN SE APRENDE

Es en el propio hogar donde se inicia la aceptación de uno mismo y son los padres quienes deben estar atentos a considerar, alabar y reconocer en cada uno de sus hijos las cualidades, aptitudes y destrezas que se manifiestan de una manera más destacada. Que cada persona se sienta importante, reconocida y alabada por algo es fundamental para lograr ese nivel mínimo de autoestima durante los años de la infancia y de la adolescencia.

Padres. profesores, educadores y monitores que tienen a su cargo niños, desde la más tierna infancia hasta bien entrada la adolescencia,  no deben escatimar los refuerzos positivos tras cada esfuerzo y acción meritoria para sentar las bases de la confianza en sí mismo y de la autoaceptación madura del adulto, sea cual fuere la realidad que le haya tocado vivir.

Las descalificaciones constantes, las burlas y los sarcasmos, el dejar públicamente en ridículo a un niño ante sus hermanos o ante sus compañeros de clase jamás favorecerán la autoaceptación y el desarrollo de una personalidad equilibrada y madura. Por el contrario, se irán minando poco a poco los frágiles cimientos de la autoestima, aparecerán los sentimientos de incompetencia, la infravaloración y el obsesivo deseo de aprobación por parte de los demás. El qué dirán, lo que puedan pensar de mí, asfixiarán cualquier brote de libertad en el obrar y expresarse y manifestarse libre y autónomamente con actitud crítica.

Las personas que recibieron de sus padres y educadores una dosis suficiente de confianza y seguridad en sus propios valores y aptitudes, acceden pronto a la madurez psíquica y a la autoaceptación que les permite considerar irrelevantes la aprobación o desaprobación de los demás. Conocen su propia realidad, sus capacidades y sus limitaciones, y lo que verdaderamente les preocupa es el juicio que merezcan para sí mismos, la aceptación de la propia realidad.

Sólo el niño que ha sido aceptado incondicionalmente por sus padres será capaz de aceptarse tal como es. Conocemos casos de homosexualidad más o menos larvada, motivada por el hecho de que los padres no supieron aceptar el sexo del hijo. Querían tener una niña y les nació un varón. Su rechazo del niño fue tan patente que éste se hizo consciente del problema desde muy corta edad y adoptó la actitud femenina que sus padres deseaban con el objeto de contentarles de alguna manera. Las condiciones de los padres impidieron en el hijo la aceptación del propio esquema corporal.

El mismo resultado deformador se puede obtener poniendo condiciones a la conducta, a la inteligencia, a ciertas aptitudes o habilidades… Con tal modo de actuar, los padres demuestran que no quieren al hijo por sí mismo, sino por razones extrínsecas a él, proyectando en la vida del hijo sus propias expectativas y frustraciones, esperando que el hijo realice algún día los proyectos que ellos no fueron capaces de alcanzar.

Alguien ha dicho que la aceptación incondicionada de sí mismo es «la primera ley del crecimiento personal».

La primera cosa que poseemos es nuestro propio ser. El primer valor con que nos encontramos en la vida somos nosotros mismos. Es inútil querer realizarnos sin querer reconocer lo que de verdad somos. Aceptar la propia «verdad interior» significa aceptarnos sin deformar lo que realmente somos.

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Es inútil que intentes realizarte como futbolista si tienes los pies torcidos. Inútil que pretendas ser como un chico cuando Dios te ha hecho mujer… ¿Acaso no tiene Freud razón cuando critica a algunas mujeres como “varones frustrados”?

Aceptar “nuestra verdad interior” significa también aceptar ese fondo de inautenticidad que todos llevamos dentro. Esos impulsos inconfesables que nunca tuvieron que ser, pero que sin embargo han sido. Si no aceptamos nuestros errores, nunca nos libraremos de ellos. No condenó Dios a Caín por haber matado a Abel, sino por no haber sabido aceptar la responsabilidad de su insensata acción.

Nuestros errores nunca nos perdonarán mientras no sepamos aceptarlos. Somos lo que somos ante nosotros mismos y no lo que aparentamos ante los demás”.

En las redes puede Usted encontrar enlaces que ofrecen descargas PDF (gratuitas), nuestra Fuente es:  VALORES HUMANOS (pág 13 y 14)

Dejamos constancia, que nos hemos permitido intercalar enlaces relevantes y algún video relacionado, así como indicar que las letras en negritas y cursivas, son nuestras. Con este recurso deseamos escuchar al profesor Tierno, y sobre todo reflexionar con quien nos sugiere que “una lectura sosegada que facilite tu aprendizaje hacia el equilibrio psicofísico y hacia una profunda paz interior, de la que te sentirás cada vez más pleno, a medida que te adentres en sus páginas. Toda la obra pretende ayudarte a saber vivir y a ser feliz”.

Esta publicación pertenece a la SERIE SOBRE LOS VALORES, LA EDUCACION Y LA DOCENCIA

«Los humanos apenas empleamos una quinta parte de nuestras posibilidades. Cuando alguien es consciente de sus potencialidades, prácticamente nada le parece imposible» (La vanguardia 23/04/2014).

REDACCIÓN WEB DEL MAESTRO CMF



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