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Bernabé Tierno: La amabilidad acerca los corazones del educador y del educando

“Nuestro tiempo de estancia en la Tierra es sólo para aprender a amar” (C. Carreto).
“La amabilidad es hacer lo que más conviene a otra persona, según lo que necesita en ese momento” (Antony de Mello).
Amabilidad se define como «calidad de amable», y una persona amable es aquella que «por su actitud afable, complaciente y afectuosa es digna de ser amada».

Al hablar de amabilidad, sin duda hemos de referirnos también al amor, pero he preferido tipificar a la amabilidad como valor por su carácter más concreto, de actitud, de rasgo firme y debido de la persona que ama. El amor es una palabra demasiado grande, universal y genérica, pero, sobre todo, es una abstracción. No existe una cosa concreta llamada amor; sólo existe el acto de amar expresado en deseos de dar, respetar, valorar, considerar a los demás, aceptarlos, procurar su felicidad, alegrarse con sus éxitos. […] que no tardará en convertirse en firme actitud, que nos predisponga a pensar, sentir y comportarnos con amabilidad. Cuando lo previsible, lo normal en una persona sea comportarse de forma afable afectuosa, es porque la amabilidad, ha adquirido la categoría de valor.

La amabilidad es la manera más sencilla, delicada y tierna de hacer realidad un amor maduro y universal, libre de exclusivismos. Ese amor que dice “te necesito porque te amo” y no “te amo porque te necesito”. Es entonces cuando la amabilidad se convierte en una constante, porque el comportarse de manera complaciente y afectuosa con los demás, sentir su felicidad, es lo mismo que sentir la propia dicha y alegría compartida. Ser amable llega a ser algo así como una necesidad biológica del espíritu.

¿QUÉ DIRÍA A LOS PADRES QUE DEFIENDEN EL AZOTE? (01´ 21”)

La amabilidad es siempre un claro exponente de madurez y de grandeza de espíritu, dado su carácter universal, integrador y de cálido acercamiento a los demás seres de la creación, con los que se siente hermanada toda persona amable.

“El amor que yo viva en mí de mí es la medida del amor con que puedo amar a cualquier otra persona. El problema está en que yo me encierro en el amor que vivo en mí y excluyo a los demás”. (A. Blay)

EDUCAR PARA LA AMABILIDAD ES EDUCAR PARA EL AMOR Y LA PAZ CONSIGO MISMO

“Podemos pagar un préstamo de oro, pero siempre estaremos en deuda con los que han sido amables con nosotros” (Prov. Malayo)

Hemos visto que la amabilidad como valor es una actitud, un modo habitual de ser y comportarse, afectuoso y complaciente de toda persona que es digna de ser amada. […] No confundamos actos de amabilidad como actitud y valor; sentido y deseado. Todos podemos ser amables en ocasiones y por diversos y hasta oscuros fines, pero no es a esta amabilidad de conveniencia a la que nos referimos, sino a la amabilidad como valor, como disponibilidad permanente, libremente asumida y ejercida.

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Pero la amabilidad es planta delicada que sólo germina en terrenos, climas y condiciones especiales [en] el hogar y poco después la escuela. El clima y las condiciones especiales de una educación para la amabilidad que ha de proporcionar el medio educativo en que se desenvuelve el niño durante la infancia y la adolescencia deben aportar y despertar los siguientes sentimientos positivos:

  • Sentirse aceptado y amado con sus cualidades y defectos.
  • ALEGRÍA COMO HÁBITO. Mostrarse satisfecho de vivir, de amar, de compartir el tiempo con el educando, en una actitud divertida y desdramatizadora.
  • Creer en su capacidad, en su bondad, en sus aptitudes, permitirle que se equivoque y transmitirle siempre el mensaje de que puede vencer las dificultades, [..].
  • ACEPTACIÓN. Dejarle ser persona, valorar su singularidad, estimularle a pensar por sí mismo, pero con honradez y respeto a los demás. […].
  • […] la seguridad le viene al niño, sobre todo, del ejemplo de normalidad y naturalidad en el trato diario y de comprobar que los adultos sabemos reconocer nuestras limitaciones y defectos, […] capaces de pedir perdón […].
  • COMPARTIR ACTIVIDADES Y SER Y ACTUAR COMO UN AMIGO.[…] , lo más normal es mostrarles nuestro deseo de compartir actividades con ellos, de reir juntos y de considerarnos amigos incondicionales que comparten dificultades y alegrías.

Y es que, en el amor existe una doble vertiente: el que ama, por lo mismo que ama, desea ser amado, busca la reciprocidad. […], se rodea de un aura de bondad y de cariño que le hace digno del reconocimiento y del cariño de cuantos viven a su lado.

Desde el punto de vista pedagógico, la amabilidad es la principal cualidad que debe poseer un educador […] no la fría estructura de una institución.

La amabilidad del educador lima las asperezas, hace innecesarios los castigos y se inclina fácilmente al perdón. En este contexto el educando puede manifestarse de manera espontánea, sin temor a ser reprimido, sin dolor ni engaño. La desconfianza, carcoma de la relación educativa, no tiene razón de ser porque la amabilidad del educador la hace imposible.

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La amabilidad acerca los corazones del educador y del educando. Cuando el educador es amable, ama todo lo que gusta al educando, y éste, en reciprocidad, está dispuesto a dar todo lo que el educador le exija. De esta manera la amabilidad hace evidente la expresión de Séneca: “Si quieres ser amado, ama”. El que es amable no sólo ama a los demás, sino que les hace sentir que son amados.

“Para pasar por hombre amable basta con narrar bien y con no hablar nunca de sí mismo” (Stendhal)

En las redes puede Usted encontrar enlaces que ofrecen descargas PDF (gratuitas) de esta obra delmprofesor Tierno. Nuestra Fuente es:  VALORES HUMANOS (pag 30-31).

Dejamos constancia, que nos hemos permitido intercalar enlaces relevantes y algún video relacionado, así como indicar que las letras en negritas y cursivas, son nuestras. Con este recurso deseamos escuchar al profesor Tierno, y sobre todo reflexionar con quien nos sugiere que “una lectura sosegada que facilite tu aprendizaje hacia el equilibrio psicofísico y hacia una profunda paz interior, de la que te sentirás cada vez más pleno, a medida que te adentres en sus páginas. Toda la obra pretende ayudarte a saber vivir y a ser feliz”.

Esta publicación pertenece a la SERIE SOBRE LOS VALORES, LA EDUCACION Y LA DOCENCIA

“Dulcifica tus formas y tu carácter. Vive la paz interior y no vayas “de guerrero” por la vida”.

REDACCIÓN WEB DEL MAESTRO CMF



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