La Planificación Inversa, un enfoque pedagógico fundamental en la educación, se destaca por su inversión de la metodología tradicional de planificación curricular. Este enfoque se centra en entender y atender las necesidades de aprendizaje de los estudiantes antes de definir los contenidos y métodos de enseñanza.
En lugar de diseñar un plan basado en lo que los educadores quieren enseñar, la Planificación Inversa se orienta hacia el objetivo de asegurar que los alumnos adquieran las habilidades, conocimientos y competencias esenciales para alcanzar el éxito académico y participar efectivamente en la sociedad. Este enfoque no solo transforma la dinámica de la enseñanza, sino que también empodera a los docentes para adaptar sus estrategias a las necesidades específicas de sus estudiantes.
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Al enfocarse en el aprendizaje como la meta central, la Planificación Inversa se convierte en una herramienta poderosa para la personalización de la enseñanza, permitiendo a los educadores alinear sus planes con los objetivos educativos a largo plazo de los estudiantes. Al comprender lo que los alumnos necesitan aprender, los docentes pueden diseñar experiencias de aprendizaje más efectivas y significativas. Esta metodología no solo promueve un ambiente educativo más centrado en el estudiante, sino que también contribuye a mejorar la calidad de la educación y a preparar a los estudiantes para enfrentar con éxito los desafíos de la vida escolar y su futura participación en la sociedad
Ello porque al planear el año en torno a los objetivos finales, se organiza una progresión de objetivos coherentes y secuenciados que establece una ruta clara de aprendizajes que se irán adquiriendo lección a lección. Empezar por el final es la mejor manera de asegurar que se lograrán los objetivos propuestos. Planificar a la inversa requiere mirar hacia adelante.
Enseñar es más que solo entregar contenidos, se trata de que los alumnos entiendan ideas complejas y desarrollen su capacidad de pensar. Aunque al inicio puede parecer contraintuitivo, planificar a la inversa es una manera efectiva de ayudar a los alumnos a manejar contenidos desafiantes pues usted estará constantemente pensando en qué quiere que ellos aprendan y cómo lo van a demostrar en cada lección. Así, la evaluación no será el punto final de la enseñanza, sino el punto de partida.
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A continuación compartimos con fines educativos la publicación del Blog Educa Ideas en donde el profesor Víctor Laurel explica tres pasos que debemos tener en cuenta a la hora de realizar una Planificación inversa.
Planificación inversa: tres pasos clave para el éxito.
Sea cual sea tu objetivo (de clase, profesional, personal), piensa siempre inverso: del final al principio. Veamos este corto sobre planificación inversa que he preparado para ti:
Planificación educativa inversa: ¿Qué es?
Antes de adentrarnos en el concepto de Planificación Educativa Inversa, es esclarecedor revisar el ejemplo presentado en el artículo sobre “Actividades Manuales vs. Actividades Intelectuales”, protagonizado por Ms. Nati. En dicho ejemplo, Ms. Nati destaca un claro modelo de planificación inversa basado en objetivos de aprendizaje concretos.
Ms. Nati tiene un propósito claro: guiar a sus estudiantes hacia una comprensión profunda de la interdependencia en un ecosistema y el funcionamiento de una red y cadena alimenticia. Su enfoque es que los estudiantes no solo adquieran conocimientos, sino que también sean capaces de deducir las implicaciones cuando elementos del ecosistema, como la flora o la fauna, enfrentan la extinción. Con este fin, ha diseñado una estrategia que utiliza una hoja de trabajo y diapositivas para visualizar el equilibrio ecológico numéricamente, un concepto que incluso los niños pueden analizar. Más adelante, plantea un escenario en el cual una de las presas disminuye hasta desaparecer y desafía a los estudiantes a argumentar las consecuencias de esta desaparición. Finalmente, los estudiantes expresarán sus conclusiones de manera sustentada, ya sea a través de redacciones o dibujos, que se exhibirán en los murales de clase.
Para evaluar la eficacia de esta planificación, es esencial hacer tres preguntas fundamentales: ¿El objetivo es claro? Sí, el objetivo es la comprensión de la interdependencia en un ecosistema. ¿Cómo se medirá el logro del objetivo? Se medirá a través de la revisión de las conclusiones de los estudiantes. ¿Las actividades planificadas respaldan el logro del objetivo? Claramente, las actividades permiten a los estudiantes desarrollar sus propias deducciones, garantizando así el cumplimiento del objetivo educativo.
- ¿El objetivo es claro? Sí. Entender sobre la interdependencia dentro de un ecosistema.
- ¿Cómo se sabrá que se logró el objetivo? A través de la revisión de las conclusiones.
- ¿Las actividades planificadas ayudan a cumplir el objetivo? Desde luego. Les permite elaborar deducciones propias.
Entonces, podemos establecer que la planificación educativa inversa constituye una estrategia (de planificación) basada en la consecución de objetivos claros y regida a un estricto orden de consideraciones, del fin a principio.
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Planificación inversa: ¿cómo hacerla? ¿cuáles son sus pasos?
Existen tres claros pasos que debes considerar al momento de realizar una planificación inversa, y como ya se estableció antes, las debes llevar a cabo en el orden indicado a continuación:
- OBJETIVOS: ¿Qué quiero que mis estudiantes logren al final de todo?
Piensa en las grandes entendimientos, conocimientos y adquisición de habilidades que deseas que tus estudiantes alcancen- - SEGUIMIENTO (EVALUACIÓN): ¿Cómo sabré que lo están o lo han logrado?
Piensa en listas de cotejo (checklist) que deberán cumplir tus estudiantes para saber que han logrado los objetivos que te trazaste. - ACTIVIDADES: ¿Qué actividades de clase exactamente debo llevar a cabo para que lo logren?
Escribe todas las actividades que vengan a tu mente, y quédate con las más significativas, las que ayuden a preparar a tus estudiantes a pasar tu lista de cotejo.
Nota 1:
De nada vale pensar primero en las actividades aprovechando los materiales que tienes a mano, o comenzar pensando en las evaluaciones que habrás de tomar si es que no tienes objetivos claros. Comenzar tanto por actividades como por evaluaciones convierte tu planificación en un estilo tradicional. No tener objetivos claros es dejar los aprendizajes y entendimientos de nuestros estudiantes a la suerte, a la deriva.
Nota 2:
Recuerda que puedes aplicar la planificación invertida a todos los aspectos de tu vida, a tus proyectos, a tus metas programadas. De hecho, el presente sitio web fue elaborado bajo dicha estrategia.
Este contenido ha sido publicado originalmente por EDUCA IDEAS en la siguiente dirección: educaideas.com
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