El inglés se ha convertido en la lengua más extendida de la era moderna, domina la industria editorial, internet, las ciencias, las artes, las finanzas, los deportes, la política e incluso los viajes internacionales. Y recordemos que el Internet, como fuente inagotable de información, tiene muchos de sus contenidos en inglés.
En un buen número de escuelas se enseña, como idioma extranjero el inglés. Pero en casi todas las escuelas, el uso de TIC, nos ha introducido en el uso de términos derivados del inglés. Sin embargo, a pesar que “la enseñanza de idiomas ha mejorado sustancialmente, todavía no le damos la importancia que se merecen a las actividades output o actividades de producción, en las que el alumno “produce” el idioma, es decir, se expresa y pone en práctica lo aprendido mediante conversaciones y comunicación real”, afirma la filóloga Paula Gómez.
En el mundo existen unos 400 millones de personas que hablan inglés como lengua materna, y 700 u 800 millones de personas que lo hablan como segunda lengua, según el experto en lingüística, David Crystal.
Es importante saber que, para la mayoría de los angloparlantes (lo dicen destacados expertos), lo importante es entenderse entre sí. Pues a pesar de existir los revisores de ortografía y los asistentes de gramática, o software de gramática; pasan por alto la violación de lo que se cree son las “reglas sagradas de la gramática”. Sin embargo, consideran que es bueno tener siempre en cuenta la importancia de tener a alguien que nos apoye.
A diferencia del francés o el español, que tienen academias encargadas de cuidar la evolución del idioma, no hay un organismo regulador para el inglés que emita reglas universales de gramática a las que los usuarios deben apegarse”.
Otro inconveniente es que es un idioma inglés se desarrolla sin ningún código común, cuya ortografía se vuelve una pesadilla, más aún cuando los ingleses frecuentemente traen y llevan con ellos diferentes partes del lenguaje que usaron en otro país. “Pero también hay ventajas: la versatilidad y un acceso ilimitado a un vocabulario fresco”.
Como hispanoparlantes que aprendemos el inglés como segunda lengua, nos viene bien conocer el mayor vocabulario posible y su significado, su equivalencia en español, y su pronunciación, teniendo en cuenta que en inglés generalmente las palabras no se pronuncian como se escriben. La enseñanza del inglés en las escuelas exige la creatividad del docente, que la haga más atractiva e interesante “de forma que estimule y motive la participación activa de los alumnos, para que sean lo más productivas posibles y lo aprendido se asimile”; facilitando el localizar errores, tanto léxicos como gramaticales, y tanto en la producción oral como en la escrita, corregir la propia expresión, tener mayor coherencia en sus mensajes y mejorar su fluidez y pronunciación. Cf ¿POR QUÉ ES TAN IMPORTANTE HABLAR INGLÉS EN LA CLASE DE INGLÉS?
Con el propósito de ayudar, a la mejor práctica del “speaking”, tanto para profesores como estudiantes que saben que “el conocimiento de idiomas es la puerta a la sabiduría” (Roger Bacon), y que el lenguaje no es un regalo genético, sino es un regalo social (cf Frank Smith), compartimos trece consejos de expertos, para hablar a o mejorar el comunicarse en el idioma inglés:
- NO TENER MIEDO DE HABLAR EN INGLÉS: tener confianza y hablar inglés con tanta frecuencia como nos sea posible.
- USAR EL GOOGLE TRANSLATE: en caso de duda sobre una palabra o su pronunciación, preguntemos a Google. Copia textos y descubre su contenido.
- ESCUCHAR INGLÉS: noticieros y canciones ayuda a aprender la correcta pronunciación de las palabras. Cuanto más escuchemos, más aprenderemos.
- LEER EN VOZ ALTA: el escuchar la propia voz te ayuda a detectar mejor los errores.
- APRENDER UNA PALABRA CADA DÍA: elegir una palabra y usarla durante el día la mayor cantidad de veces en que sea posible.
- APRENDER LOS VERBOS IRREGULARES: Se trata de aprenderse 2 o 3 verbos en una semana. Pero aprendérselos muy bien, y decirlos sin titubear.
- VER PELÍCULAS ORIGINALES: el escuchar a los actores, y el interés por la trama nos hará prestar mayor atención al nuevo vocabulario y a la pronunciación.
- ESCUCHAR AUDIOBOOKS: evitará el grave error de leer textos que no tienen audio, pues difícil olvidar una mala pronunciación.
- TENER AMIGOS DE HABLA INGLESA: ayuda mucho para mejorar el vocabulario y la pronunciación, así como el centrase en un tema.
- USAR EL DICCIONARIO: ayuda a usar sinónimos y mejorar el conocimiento de otras palabras.
- PENSAR EN INGLÉS DIRECTAMENTE: los idiomas deben ser aprendidos directamente, sin recurrir a otro, tal cual como aprendimos nuestra lengua materna. Cada idioma tiene su propia forma de decir las cosas, sus propias estructuras, frases, expresiones y formas propias de hablar y pensar.
- CANTAR EN INGLÉS: aprender las letras de canciones y cantarlas, o escuchar y leer la letra, es un camino muy efectivo para hablar otro idioma.
- DESCARGAR APPS PARA APRENDER INGLÉS: ya sea en el móvil o smartphone o en la tableta, y que existen en cantidad en las redes.
Algunas de estas sugerencias han sido tomadas de: 10 CONSEJOS PARA MEJORAR TU INGLÉS ORAL, y 50 CONSEJOS PARA MEJORAR TU INGLÉS Y SUBIR DE NIVEL
El corrector de estilo Benjamin Dreyer, en su libro “Dreyer’s English” (El inglés de Dreyer), sostiene que “el inglés es un idioma violentamente irregular“. Y si se desea que la gente lea y entienda lo que se estamos tratando de decir o piense que sabemos de lo que estamos hablando, nos ofrece estas sugerencias:
1. COMIENZA DE INMEDIATO A ESCRIBIR EL MEJOR INGLÉS.
Y esto se logra deshaciéndose de “ciertas palabras que inundan la escritura de la mayoría de la gente”, como “muy”, “algo”, “bastante”, “justo”, “de hecho” y” realmente”, es muy probable mejorar la escritura en un 20%.
2. ROMPE ALGUNAS “NO REGLAS”
En el inglés existen “reglas” que son arbitrarias y de origen dudoso y que no harán nada por la escritura, que se han metido “en la cabeza desde niños o en la escuela”. Como comenzar una oración con “y” o “pero”, o terminar una oración con una preposición. No hay ninguna justificación particular para esa prohibición, y menos es un error.
3. SUMÉRGETE EN EL TEXTO
Para ello se debe tomar una pieza de escritura que más nos guste o algo que pensemos que está bien hecho, y luego copiemos palabra por palabra. Al hacerlo a mano o en un ordenador o computadora, se descubre lo asombroso que es recrear la escritura de otro. Por medio de este ejercicio quedaremos atraídos por las cosas que podemos “aprender sobre el sentido del ritmo, la elección de palabras, la puntuación”, pues todo entra por los dedos hacia el cerebro.
Recordemos que el hablar otro idioma nos facilita la comunicación con otras personas, otras culturas y a entender que todo el mundo no es igual, como sostuvo el cineasta italiano Federico Fellini: “Cada idioma es un modo diferente de ver la vida”. Por eso aplaudimos los países en que están tratando de rescatar, desde sus planes de estudios escolares, sus lenguas originarias, pero que no descuidan el enseñar un idioma, como el inglés, que va siendo como el latín mantenido como lengua científica hasta el siglo XIX.
“Si hablas a una persona en una lengua que entiende, las palabras irán a su cabeza. si le hablas en su propia lengua, las palabras irán a su corazón” (Nelson Mandela).
REDACCIÓN WEB DEOL MAESTRO CMF