Subrayar todos los apuntes a color y no dejar ni un espacio en blanco no es, precisamente, una técnica de estudio. De hecho, perjudica la salud visual y no influye en la manera en la que interiorizamos la información. ¿Cómo subrayar los apuntes entonces? Debes saber que la jerarquía de colores y algunos códigos de color sí son técnicas de subrayado que te ayudan a estudiar más eficazmente. Infórmate sobre cómo aplicar estas técnicas de aprendizaje para hacer las horas de estudio más productivas.
Si se aproximan los exámenes finales, tienes que aceptar que el cerebro no puede interiorizar toda la información que recogemos en nuestros apuntes de principio a fin. Al margen de la ineficaz técnica de tratar de memorizarlo todo sin interiorizar la teoría, una buena manera de estudiar y asimilar mejor el nuevo contenido es segmentar la información mediante el subrayado. Es decir, jerarquizar lo que es más importante y destacar determinadas palabras claves o datos relevantes.
Además, el tiempo que emplearemos en el subrayado servirá para comenzar a estudiar y conocer toda la extensión del temario. Podemos empezar por tramos, marcar objetivos y, una vez subrayado todo adecuadamente, hacer esquemas, resúmenes, mapas mentales…que son otras técnicas de estudio.
¿Cómo subrayar los apuntes?: Técnicas infalibles que facilitan el estudio
Como hemos comentado, subrayar te servirá para destacar visualmente lo que es más importante. Así sabremos detectar qué información hay que retener y podremos llevar a cabo un estudio más rápido y fructífero, sobre todo a la hora de repasar.
Para subrayar correctamente hay que seguir un modus operandi, puesto que será determinante la manera en que usamos los colores y priorizamos unos conceptos sobre otros.
- Cada color empleado debe asignarse a una función o rol: por ejemplo, emplear siempre la misma categoría de colores y variar en función de si queremos subrayar:
- El título, subtítulo o epígrafes
- Palabras clave
- Listas, check points o enumeraciones
- Datos importantes: artículos, fechas, autores
- El texto más importante a estudiar (definiciones, explicaciones, historia…)
El método de diferenciar el tipo de información por colores te permitirá distinguir los conceptos en función de su grado de importancia, una clasificación que ayudará a tu cerebro. Para ello podemos emplear desde dos hasta cinco colores; sin embargo, no es recomendable emplear una mayor cantidad de colores, de lo contrario conseguiremos agobiarnos.
- Puedes hacer distinciones utilizando distintos tipos de subrayado: Estos son algunos ejemplos:
- Subrayar con una línea fina por debajo de la escritura,
- Subrayar tachando, es decir, mediante líneas simples o dobles que cubra todas las palabras,
- Subrayar mediante un realce especial: encuadrar algunos términos, rodearlos en círculo, trazar líneas perpendiculares a los párrafos, dibujar asteriscos, puntos, etc.
- Subrayado estructural: Este consiste en escribir en el margen izquierdo del texto la idea principal de este; lo que servirá para proporcional al subrayado una estructura.
- Elabora una guía o leyenda: aclara cuál es la jerarquía de colores empleada y qué funcionalidad representa cada tipo de subrayado. Al igual que en la elaboración de mapas geográficos hacemos una leyenda con la que orientarnos en la categorización de la información, con el subrayado de apuntes ocurre lo mismo.
De esta forma, organizamos la información de una manera más visual e intuitiva.
Consejos para subrayar tus apuntes
Estos tips te servirán para entender mejor la utilidad del subrayado y cómo hacerlo correctamente:
- Comienza tu subrayado con lápiz para que puedas rectificar fácilmente antes de emplear los clásicos rotuladores. Así harás más lecturas intensivas.
- Una forma de saber qué información es importante y cuál no es hacerte preguntas y respuestas. Te ayudará a comprender mejor el temario, distinguiendo entre ideas principales e ideas secundarias.
- Evita abusar del subrayado o destacar muchas frases completas. Ello te dificultará detectar la información relevante. Algunos maestros de oposición recomiendan no subrayar más del 25/30% del texto.
- Utiliza colores neutros o menos fuertes para lo que más debas subrayar. En cambio, para palabras clave, determinados datos o títulos puedes emplear los colores más fluorescentes. Tu vista te lo agradecerá.
¿Ya sabes cómo subrayar el temario?
Ahora puedes ponerte en marcha y ayudar a tu cerebro a asimilar mejor la información mediante una segmentación más atractiva.
Este contenido ha sido publicado originalmente por Universia en la siguiente dirección: universia.net