El profesor Francisco Mora Teruel se licenció y doctoró en Medicina en la Universidad de Granada (España), y se doctoró en Neurociencias en la Universidad de Oxford (Reino Unido). Es catedrático de Fisiología en la Universidad Complutense de Madrid y profesor adscrito de Fisiología Molecular y Biofísica en la Universidad de Iowa (USA).
Es un investigador con un amplio currículum con investigaciones, artículos, conferencias y libros sobre el cerebro y sus conexiones con la realidad, que acerca su vocación hacer más asequible al gran público los avances de la Neurociencia.
La periodista de Educación en el diario EL PAÍS, Elisa Silió; realizó una entrevista al profesor Mora, sobre temas que nos pueden ser útiles en nuestra tarea docente y muy afines a este tiempo de educación a distancia. Compartimos partes de la publicación con motivos únicamente educativos y de formación permanente, invitándoles a leer la publicación completa en el enlace que señalamos al final como fuente.
“Hay que rediseñar la forma de enseñar”.
Francisco Mora considera que hay mucho “charlatán” hablando de neuroeducación. Y eso “desbarata la credibilidad de lo mucho que se puede decir” sobre cómo el cerebro actúa durante el aprendizaje,. En su ensayo Neuroeducación opina que solo se puede aprender aquello que se ama.
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ELISA SILIÓ: ¿La educación online se puede mantener en el tiempo?
FRANCISCO MORA: “El maestro es insustituible. Tú no puedes educar a un niño con una pantalla. Es imposible. La humanidad del maestro tiene que estar con todos sus matices emocionales. En la pantalla lo que ves es un sesgo de cara y lo que significa la expresión oral y su voz, pero poco más”
“No todos los chicos están preparados para aprender a leer antes de los 7 años”
ELISA SILIÓ: ¿Tan mala es la pantalla?
FRANCISCO MORA: ”No se puede estar atento más de 20 minutos a una pantalla. Porque, de alguna manera, todo lo que es aprender y memorizar significa una imagen polisensorial. Menos el tacto, se necesita todo lo demás, y la pantalla no proporciona ninguna emoción. […] Sí se puede utilizar lo telemático para cosas concretas, para un seminario, para aspectos complementarios…”.
ELISA SILIÓ: Pero tampoco cree que la atención dure mucho más en una clase presencial.
FRANCISCO MORA: “El foco atencional no es que tú prestes atención 10 minutos mientras lees. Son destellos que se encienden y se apagan y eso tiene que ver con la fluidez de la lectura de cada uno. […] En clase, cada 10 minutos, hay que romper el discurso estrictamente académico con una anécdota que no dure más de minuto y medio o un chiste no barato… Está registrado que entonces vuelve a subir la atención. […]”.
ELISA SILIÓ: ¿El confinamiento puede pasar factura escolar?
Francisco Mora: “Sí, pero no patológica, sino en forma de deficiencias en la educación, es decir, en los valores, las normas y los hábitos. Los hábitos éticos solo se pueden crear en los primeros años de vida […]”.
ELISA SILIÓ: Pero estos valores y hábitos se pueden aprender en casa.
FRANCISCO MORA: Hay un fallo en la educación de valores, normas y hábitos éticos porque la relación de las familias con los colegios es esquizofrénica. No se pueden enseñar valores A en el colegio y B en la familia. En el futuro se tendrá que institucionalizar los encuentros con el maestro para hablar de qué se le enseña en ética en familia y en el colegio a edades muy jóvenes. La contradicción jamás afianzará en el cerebro de un niño un hábito ético”.
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ELISA SILIÓ: … al 76% de docentes y padres les preocupa la falta de motivación de los alumnos …
Francisco Mora: “Los niños que han tenido dispersión durante la pandemia, de alguna manera, inicialmente van a tener problemas. Eso está claro. Pero va a depender mucho del profesor que esos problemas iniciales tengan influencia a largo plazo”.
ELISA SILIÓ: ¿Es más importante tener menos alumnos en clase o un docente inspirador?
Francisco Mora: “El maestro es vital. La atención ejecutiva la forman redes neuronales de la corteza cerebral, pero también del tronco encéfalo, porque tiene que ver con la recompensa: el placer de escuchar a una persona. Es fundamental cómo dice el maestro las cosas y qué tonos emocionales emplea para que sea atractivo”.
“Las emociones sirven para almacenar y recordar de una forma más efectiva”.
ELISA SILIÓ: ¿Volver a centrar a los alumnos va a llevar meses?
FRANCISCO MORA: “Estar cuatro meses encerrados destruye los hábitos […]. Somos gente con una estructura del día a día muy repetida: me levanto, desayuno, voy a clase, tengo mis amigos… Eso, en el confinamiento, sobre todo cuando hay un fuerte componente emocional —como es el caso de los niños— es destructivo. […] Es difícil de evaluar, pero que está ahí como problema es más que evidente”.
ELISA SILIÓ. ¿De modo que los escolares son el segmento más afectado cognitivamente?
FRANCISCO MORA: “[…] Su mundo entero está alimentado por la emoción y, si las relaciones emotivas con los hijos o los amigos se cercenan, el deterioro mental se acelera de una manera escandalosa. Eso no lo han sabido ver en esta pandemia. Los hábitos se han roto y la plasticidad cerebral a esas edades cuesta”.
ELISA SILIÓ: ¿Si el estado de ánimo o físico determina lo que extraemos de una lectura, también que se lea en una pantalla y no en un libro físico?
FRANCISCO MORA: “[…] la lectura de Internet en los jóvenes, que es constante, rompe el foco atencional ejecutivo que se necesita para estudiar que es relativamente pausado. Mientras que en Internet se salta de una temática a otra y eso va en deterioro de la progresión de estudio del joven”.
Este contenido ha sido publicado originalmente por El País (España) con el título: EL NEUROCIENTÍFICO FRANCISCO MORA: “EL MAESTRO ES INSUSTITUIBLE, EN LA PANTALLA SOLO VES UN SESGO DE CARA” en la siguiente dirección: elpais.com
