La especialista en Psicología y Educación, Connie Yowell con Licenciatura en Yale y doctorado en la Universidad de Stanford (USA), es CEO de Collective Shift dedicado a rediseñar los sistemas sociales para la edad conectada, y su primer esfuerzo es LRNG. Fue profesora asociada de la Universidad de Illinois y como analista política en el Departamento de Educación de EE.UU.
“Después de dedicar más de 30 años al estudio de los procesos de aprendizaje de los jóvenes, Yowell defiende que la innovación tiene que nacer en espacios menos rígidos, en talleres organizados por museos, bibliotecas o plataformas ciudadanas”, así mismo respalda la necesidad de una educación innovadora, flexible, continua y no monopolizada por las escuelas o las universidades.
Como una premisa para conocer la propuesta educativa de Connie Yowell, sugerimos ver el siguiente video, colgado en Youtube por Espacio Fundación Telefónica Madrid, en el que la profesora nos habla sobre los nuevos métodos de aprendizaje en un mundo digitalizado (inteligencia Artificial) y sobre la transformación del paradigma educativo.
CÓMO AFECTAN LAS REDES SOCIALES Y LAS NUEVAS TECNOLOGÍAS A LA EDUCACIÓN (13´27”)
Por considerar que la opinión de Yowell es autorizada y toca temas importantes sobre el sistema educativo, la tecnología y las herramientas online, el aprendizaje conectado, la innovación educativa fuera de las aulas, el éxito escolar y el desarrollo de competencias; es que compartimos, con fines únicamente educativos – pastorales, algunas partes del diálogo de Ana Torres y Connie Yowell, extraídas de una entrevista que concedió al tabloide El País (España), y una pregunta (intercalada) de la periodista Ana Laya, especialista en innovación y branding, publicada por The Objetive, con la respuesta de Yowell, que reforzará en la pregunta siguiente de Torres.
ANA TORRES: … ¿cree que la clave está en cambiar los contenidos de los programas académicos?
CONNIE YOWELL: El sistema educativo no está fallando, sigue cumpliendo el objetivo para el que fue diseñado: la producción masiva de estudiantes. Tanto en España, como en Estados Unidos o China se entrenan ciertos tipos de comportamiento como la obediencia, muy ligados a conseguir ciudadanos eficientes en las fábricas. A los niños de hoy les resulta complicado encajar en ese modelo. Al principio de mi carrera pensaba en cómo hacer el aprendizaje más atractivo o cómo asegurar la igualdad de oportunidades independientemente de la clase social. Con el tiempo me di cuenta del error. Había que salir de la academia y dedicar muchas horas a entender qué estaba pasando en internet y qué era lo que tenía a los jóvenes tan enganchados. Ahí descubrimos un nuevo concepto: el aprendizaje conectado.
ANA LAYA: ¿Cómo surge el término aprendizaje conectado?
CONNIE YOWELL: La principal conclusión del trabajo que realicé en la Fundación MacArthur acerca de cómo mejorar los procesos de aprendizaje, aprovechando los nuevos medios digitales, se puede resumir con el término “aprendizaje conectado” y se puede explicar de manera bastante sencilla, el mejor aprendizaje ocurre cuando el estudiante logra conecta tres cosas: su pasión, eso en lo que más desea convertirse; un grupo que comparta el mismo interés, para que puedan trabajar en ello juntos, el aprendizaje es algo social; y que esa pasión, ese oficio, esa profesión, tenga algún impacto en el mundo real, que esté conectado con algo relevante, desde conseguir un buen trabajo o lograr una publicación, hasta ayudar a construir una mejor comunidad… la base de todo es que la pasión al unirse con el esfuerzo compartido tenga un impacto tangible. Eso es el aprendizaje conectado. «LOS DIPLOMAS DEBERÍAN TENER FECHA DE EXPIRACIÓN».
ANA TORRES: ¿Cuál es la diferencia fundamental con el aprendizaje tradicional?
CONNIE YOWELL: Los jóvenes de hoy aprenden de forma efectiva cuando coinciden tres elementos. Les interesa un tema, encuentran a un grupo de personas que comparten esa inquietud y ese aprendizaje les sirve para algo en su día a día. Eso es el aprendizaje conectado. La tecnología y las herramientas online permiten que esos tres factores coincidan y por eso son críticas para transformar la manera en la que aprendemos. […] El intercambio de contenidos y el aprendizaje que se da en esas plataformas es extraordinario.
ANA TORRES: ¿Deberían las escuelas sustituir los libros por plataformas online de donde extraer el conocimiento?
CONNIE YOWELL: Los recursos que se utilizan hoy, como los libros, los lápices o el papel, tienen que cambiar de forma drástica. Pero el foco no está en lo material, sino en un cambio de mentalidad. La innovación no tiene que nacer en las escuelas, que son muy resistentes al cambio. Tenemos que empezar a innovar fuera de las aulas. La sociedad se tiene que volcar en crear nuevas iniciativas que luego se puedan replicar en las escuelas. Los lugares donde se organizan actividades extra escolares, como los museos o las bibliotecas, tienen que inventar nuevas experiencias de aprendizaje. Los colegios no son laboratorios donde probar nuevas metodologías porque la innovación conlleva prueba y error, y, por lo tanto, fracasos. Son espacios de mucha relevancia donde nos jugamos mucho. Los profesores están enseñando al hijo de otra persona y esos conocimientos influirán en su futuro. No podemos esperar que sean las escuelas las que lideren el cambio.
ANA TORRES: Más a allá de las pedagogías, ¿cree que hay algún elemento que ya se puede modificar en los colegios?
CONNIE YOWELL: La evaluación está totalmente separada del aprendizaje, se dedica mucho tiempo a preparar los exámenes y eso es un error. Hay que introducir la evaluación en el proceso de aprendizaje y para eso es muy útil la tecnología. Los videojuegos son un buen ejemplo; al tiempo que juegas sabes en todo momento cómo lo estás haciendo y qué puntuación estás obteniendo. No hay ninguna necesidad de detener el aprendizaje para realizar una prueba. También hay que modificar el concepto de éxito escolar, pasar de la memorización al desarrollo de competencias. Eso es lo que asegurará a los estudiantes que encuentren un trabajo en el futuro.
La entrevista completa la puede Usted leer en: “LOS COLEGIOS NO SON LUGARES PARA PROBAR NUEVAS METODOLOGÍAS”
“Lo emocionante es que ahora -en la era digital- tenemos las herramientas que nos permiten promover la participación. Las herramientas digitales hacen que sea mucho más sencillo participar e impactar a lo grande”.
REDACCIÓN WEB DEL MAESTRO CMF