El uso del teléfono móvil inteligente, smartphone o celulares “construido sobre una plataforma informática móvil, con mayor capacidad de almacenar datos y realizar actividades, semejante a la de una minicomputadora, y con una mayor conectividad que un teléfono móvil convencional” (Wikipedia), es cada vez más usado por los niños y jóvenes. Su uso en la educación es aún motivo de opiniones diversas, para Luis Galván Moreno, profesor en la Universidad de Navarra, los profesores tenemos el reto de utilizarlo a nuestro favor y promover el aprendizaje cooperativo.
“La consigna es que, si el celular de un alumno no tiene cámara y el de otro sí, se prestan”. “Así los chicos comparten y rompen el mito de que el celular individualiza”. Tenemos la oportunidad de aprovechar dada la atracción, que en un número cada vez más creciente, los escolares tienen hacia estos aparatos tecnológicos quizá sería más interesante dar la vuelta a la situación y utilizarlos con fines educativos”, sugiere el experto en tecnología Jaime Carrasco. EL USO DEL CELULAR EN EL AULA AYUDA AL APRENDIZAJE.
Por otro lado, el estudio del London School of Economics, revelado por la CNN, concluye que aquellas instituciones educativas que restringen el uso de los dispositivos móviles obtienen mejores resultados académicos, ya que es un elemento distractor para los alumnos menor aprovechamiento, mientras que a los más aplicados les permite enfocarse en las clases. Según los investigadores Richard Murphy y Louis-Philippe Beland, el resultado de “prohibir los teléfonos a estos estudiantes equivale a una hora adicional de clases por semana, o a aumentar el año escolar en cinco días”.
“Algunos países han restringido el uso de teléfonos celulares en las aulas. Por ejemplo, en noviembre del año pasado, la provincia de Castilla La Mancha, en España, prohibió el uso de celulares en las escuelas, “salvo en los casos previstos expresamente en el proyecto educativo del centro o en situaciones excepcionales, debidamente acreditadas”. “Otros, en cambio, han flexibilizado sus políticas y dejado en manos de las escuelas la decisión de prohibir o no el uso de estos dispositivos en clase. Por ejemplo, el alcalde de Nueva York, Bill de Blasio, anuló en marzo pasado una disposición que regulaba el uso de los celulares en la escuela”. NO A LOS CELULARES EN LA ESCUELA.
El experto en pedagogía. José Antonio Marina afirma que “una persona para sobrevivir, tiene que evolucionar al mismo tiempo que evoluciona su entorno”, pero “casi todas las cosas que se hacen mal en educación”. “¿Quién hace los currículums de Primaria y Secundaria, que es donde se define qué es importante y qué no? No tenemos claro muy bien quién lo tiene que hacer: ¿los políticos?, no lo saben. ¿Los científicos? no lo saben; los padres, tampoco; los empresarios, tampoco. ¿Entonces quién?”. Sugerimos leer este artículo: UNA EDUCACIÓN QUE REFUERCE LA CAPACIDAD CRÍTICA ANTE LOS MEDIOS Y ENSEÑE A EXPLOTAR LAS TIC.
En el año 2015, el Ministerio de Educación Pública de Costa Rica (MEP) emitió unas disposiciones sobre el uso de los teléfonos móviles en las escuelas, y pedía a los profesores una mayor dosis de paciencia, con un protocolo para el uso de los celulares: “El docente no puede decomisarles el teléfono porque es un bien privado. Está prohibido por ley. Su uso está permitido dentro del salón de clases solo para fines educativos, supervisado por el docente” […] “Durante los recreos, los alumnos podrán utilizar su celular para fines recreativos, mientras no sea para ver pornografía. En este caso, el personal del centro educativo debe llamar a los padres del menor y a la Policía”, afirmó Kerly León, jefa de Derechos Estudiantiles del MEP. Disposiciones que requerían ser insertados en los reglamentos internos de los centros educativos de secundaria. LINEAMIENTOS GENERALES PARA EL USO DE DISPOSITIVOS MÓVILES PROPIEDAD DE LOS ESTUDIANTES EN EL CENTRO EDUCATIVO.
Ahora, para el año lectivo 2017 – 2018, el Ministerio de Educación Pública de Costa Rica ha propuesto que cada profesor planifique su clase, siguiendo la NORMATIVA DEL USO DE LOS DISPOSITIVOS Y TELÉFONOS MÓVILES PROPIEDAD DE LOS ESTUDIANTES EN LA EDUCACIÓN SECUNDARIA EN COSTA RICA, que permite el aprovechamiento de enlaces con recursos virtuales, una como herramienta flexible que puede ser parte de la dinámica de clases; porque “ver el teléfono como distractor es más acorde con una forma de educar vieja que no utiliza medios audiovisuales y los jóvenes de ahora pertenecen a una generación que se ha desarrollado con otros medios y eso es lo que tenemos que incorporar en las aulas“, afirmó la viceministra Académica del MEP, Alicia Vargas. Estas orientaciones ofrecen “una serie de recomendaciones para los directores de los centros educativos, docentes, estudiantes, Juntas Administrativas, la familia y la comunidad, en un afán por convertir los dispositivos móviles en aliados para lograr mayores y mejores aprendizajes, con actividades innovadoras y motivadoras para la población estudiantil”. Compartimos con fines únicamente educativos – pastorales, esta excelente infografía de la publicación de Patricia Recio en La Nación (Costa Rica): LAS REGLAS CLARAS:
Consideramos que puede ayudarnos mucho el conocer esta propuesta, (una de las primeras – hasta donde llega nuestro conocimiento- reglamentada), sobre el uso de dispositivos móviles inteligentes como herramientas didácticas, ya que cuentan con el profesor como el facilitador y pueden ser aplicados durante el desarrollo de las sesiones de aprendizaje. Además, ha sido elaborada con la participación de todos los agentes de la comunidad educativa (que es fundamental para su legalidad y validez), después de un proceso de análisis y discernimiento. “El documento está pensado como un tributo que le permita a cada centro educativo encontrar su propio marco de referencia y procedimental que estimule nuevas formas de enseñar y aprender a una generación que considera el uso del teléfono celular igual como concibe el acto de vestir el uniforme del colegio, algo natural”.
Toda esta información puede ser de gran utilidad para pensar sobre las orientaciones o normas similares que tendremos que aplicar (si no le hemos hecho ya) en nuestra propia realidad, ahora o más adelante. Queda siempre, para el diálogo y la reflexión, las diferentes opiniones sobre el derecho de los alumnos a que se les respete su teléfono inteligente como su bien y el de los profesores a dar su lección sin agentes distractores.
REDACCIÓN WEB DEL MAESTRO CMF