El matemático inglés Michael Francis Atiyah fue un especialista en la geometría (Fallecimiento: 11 de enero de 2019), con experiencia académica en Oxford, Cambridge, Instituto de Estudios Avanzados (USA), Trinity College, Universidad de Leicester y profesor honorario en la Universidad de Edimburgo, opina que las matemáticas deben su riqueza y diversidad, y por tanto su desarrollo, a los problemas y conceptos que le vienen de fuera.
El País (España), publica una entrevista a Atiyah ganador del Premio Abel (2004), que otorga la Academia Noruega de las Ciencias y las Letras, considerado el Nobel de Matemáticas, por la autoría con Isadore Singer, del Teorema del Índice, con el periodista Javier Fernández, y dialogan sobre temas que nos pueden ser útiles en nuestra tarea docente, aunque no seamos de la especialidad. Habla sobre el talento matemático, las dificultades, cómo encontrar el camino motivador, cómo pueden ayudarlos padres a los estudiantes que desaprueban matemáticas y las clases online. Compartimos partes de la entrevista, por motivos únicamente educativos. Los resaltados son nuestros.
Javier Fernández: ¿Existe el talento matemático?
Michael Atiyah: Sí. Como para la música, para las matemáticas hace falta algo de talento. Pero incluso quien no lo tiene puede aprender a disfrutar de ellas. No todos somos Mozart, pero podemos apreciar la música. La labor del profesor para alentar al alumno es primordial.
Javier Fernández: Pero con lo hueso que son, ¿cree que alguien puede gozar de ellas?
Michael Atiyah: Claro, solo necesitas los estímulos adecuados y algo de práctica. En general, a la gente le gustan. En los periódicos hay páginas dedicadas a problemas, a sudokus… Disfrutamos porque suponen un reto para la mente.
Javier Fernández:¿Pero se pueden disfrutar de la misma forma que el arte, por ejemplo?
Michael Atiyah: Sí, solo necesitas algo de experiencia, algo de ánimo y que estén presentadas de manera atractiva para que capten tu atención. Se pueden disfrutar de la misma manera que una obra de teatro. Si es mala, no te entusiasmará, pero si es buena…
Javier Fernández: ¿Cómo alentaría a los estudiantes que suspenden esta asignatura?
Michael Atiyah: Diciéndoles que hagan un esfuerzo por comprenderlas. A nadie le gustan las matemáticas si no las entiende. Si no tienen claro a qué se quieren dedicar en su vida, les diría que estudien matemáticas hasta donde puedan porque serán muy útiles en muchos aspectos de su vida y en muchas profesiones. Las matemáticas nos brindan una de las múltiples maneras que tenemos de pensar. Nuestra mente es muy complicada y utiliza otras inteligencias como la artística o la emocional para manejar situaciones. Ninguna de ellas explica la vida por sí misma.
Los matemáticos, además, pueden trabajar en coalición con expertos en muchísimas disciplinas. Especialmente en el desarrollo del conocimiento del cerebro, el gran reto del nuevo siglo.
Javier Fernández: ¿Cómo animaría a los padres que ven fracasar en matemáticas a sus hijos?
Michael Atiyah: Les diría que tengan paciencia y los alienten y, sobre todo, que no olviden estimularlos en otros aspectos: que los lleven a exposiciones, que les enseñen a leer el periódico y que, por qué no, les dejen ver la televisión.
Javier Fernández: ¿Ha oído hablar de los youtubers que imparten clases de matemáticas online?
Michael Atiyah: Claro que sí. Tenemos que usar todos los medios de comunicación disponibles con fines educativos. En el pasado tenías tu voz, tus manos y la pizarra; ahora puedes llegar a todo el mundo desde tu ordenador. Eso sí, es peligroso para el espectador porque hay personajes populares de calidad incierta. Es un riesgo que hay que correr.
La entrevista completa la puede Usted encontrar en este enlace: “SIN TALENTO PARA LAS MATEMÁTICAS TAMBIÉN SE PUEDE DISFRUTAR DE LOS NÚMEROS”.
En otra entrevista para el mismo medio, concedida a Bernardo Marín, en el 2012, Michael Atiyah dijo que si Platón creía en el sabio debía liderar al pueblo, los matemáticos deben ser hoy, líderes de la civilización; porque de una teoría surge otra y no hay peligro que se agote ese caudal de felicidad que encuentra el sabio en su trabajo. La belleza «se ve inmediatamente […] y puede ser una antorcha que te conduzca a la verdad, porque en las matemáticas ambos conceptos van a menudo unidos».
Le recomendamos leer la opinión de Salvador Vidal y la enseñanza lúdica en EL MITO DE QUE LAS MATEMÁTICAS SON DIFÍCILES ES FALSO, LO PRIMERO QUE HAY QUE TRABAJAR ES LA ACTITUD.
«Como las matemáticas exigen una concentración intensa conviene hablar con otras personas, combinar el pensamiento solitario con una buena conversación”.
Si le interesa esta entrevista con Bernardo Marín la encuentra en este enlace: «LAS MATEMÁTICAS SON COMO UNA CATEDRAL GÓTICA».
REDACCIÓN WEB DEL MAESTRO CMF
Muy interesante. no existe una sola inteligencia o talento. El que sabe o domina arte es tan igual que el que es experto en números