El lenguaje es un sistema de comunicación formado por signos de tipo oral y escrito, que sirven para que los seres humanos podamos expresar nuestras ideas, pensamientos, emociones y sentimientos. Es así que podemos encontrarnos con diversas dificultades y habilidades que se pueden generar en este sistema; iniciándose con la articulación de las palabras en la primera infancia (0 a 5 años) y que se relacionan con las habilidades motoras de los músculos implicados en el habla.
En este artículo se plantean algunos ejercicios que puedan realizarse en casa para estimular o fortalecer algunos movimientos buco-faciales en la lengua, labios, mejillas y el paladar, que permitan un buen desarrollo del lenguaje articulatorio. Se recomienda realizar los ejercicios de manera lúdica por lo menos todos los días en un tiempo aproximado de 5 minutos:
Ejercicios con la lengua: mover la lengua en todas las direcciones (arriba, a los lados, etc.), estirar la lengua hacia afuera, llevarla al paladar superior, tocar todos los dientes con la punta de la lengua.
Ejercicios con los labios: sostener un palillo con los labios sin introducirlo completamente a la boca. También puede apretar y aflojar los labios, separarlos y juntarlos rápidamente. Realizar el sonido de la letra P con los labios repetidamente.
Ejercicios faciales: inflar y desinflarlas las mejillas luego de retener el aire algunos segundos, alternar las mejillas primero del lado izquierdo y luego inflar la derecha. Retener agua en la boca y botarlo lentamente.
Ejercicios respiratorios: realice movimientos simples y repetitivos, incorporando sonidos. Realizar inhalaciones y espiraciones nasales y bucales reteniendo el aire. Retener progresivamente el aire dentro de la boca o nariz, realizar inspiraciones rápidas, lentas o profundas, dejando salir el aire rápidamente.
Soplar: poner cualquier objeto liviano para que al soplar se derrumbe (legos), mueva (bolitas de papel, de algodón) o apague (vela/fósforos), utilice pajillas para aspirar agua o jugo, soplar burbujas de jabón.
Ejercicio de ritmo: en el desarrollo del lenguaje, el ritmo es esencial para que puedan articular correctamente las palabras. Realizar sonidos rítmicos imitando al adulto, dando pequeños golpes a una mesa o tambor.
Jugar con las sílabas: articule sílabas usando alguna consonante, de manera repetida, por ejemplo: con la letra P la sílaba pa, pa, pa, pa, pe, pe, pe, po, po, po; cada vez que realice este ejercicio se ejercita el ritmo y la articulación, mejorando las habilidades del lenguaje.
Articular frases: utilice frases completas, poesías, trabalenguas o cuentos cortos, hacer repetir varias veces a su hijo/a hasta que logre articular de manera correcta.