S¿Qué tan importante es, para los profesores, conocer las neurociencias? ¿Cómo las neurociencias pueden ser de gran utilidad a los padres de familia a la hora de educa? Entre muchas otras cosas sostienen que los padres, diseñan a modo de arquitectos inconscientes, los cerebros de sus hijos. Así mismo toda relación de los profesores con los estudiantes activan sus redes neuronales, y por to tanto, actúa en todo su proceso de aprendizaje.
La pedagoga y escritora argentina Nora Rodríguez, sostiene que “es imprescindible enseñar a niños y adolescentes a lograr conexiones sociales positivas, para que desarrollen sus talentos, y también para que logren una buena salud y bienestar interior; lo que tendrá como consecuencia que puedan poner en marcha todo el potencial siendo cada vez más conscientes de sus capacidades”, y que los padres de familia y profesores “tienen el desafío no sólo de saber cómo funciona anatómicamente el cerebro sino cómo aprende, cómo influye la actitud del adulto en los aprendizajes, o cómo el estrés lo frena”.
Desde 1990 vive en Barcelona, dictando cursos sobre el maltrato invisible y los conflictos de comunicación, especialmente entre padres e hijos, creadora del programa Educar para la felicidad, para aulas libres de violencia y autora de más de treinta libros.
Con fines únicamente educativos, hemos elegido cinco preguntas con sus respectivas respuestas, de la entrevista realizada por Carlota Fominaya para ABC (España), a Nora Rodríguez, con motivo de la presentación de su libro “Neuroeducación para padres”, esperando nos ayude a conocer un poco más sobre esta propuesta en la enseñanza – aprendizaje. Los resaltados con “negritas” es nuestro.
¿Qué es lo más importante que deben saber los padres sobre el cerebro de sus hijos?
NORA RODRÍGUEZ: Que no hay recetas mágicas. Y que, si cada familia es diferente, cada niño no sólo tendrá un diseño del cerebro diferente, sino que aprenderá a partir de sus propios recursos. Creo que es una época importante en cuanto al protagonismo educativo de los padres, que deben aprovecharse de las increíbles investigaciones que aporta cada poco la ciencia. También deben ser conscientes de que los colegios aún no logran adaptarse al cambio educativo, por lo tanto, son ellos los que, participando junto con sus hijos de un movimiento educativo mundial, pueden empezar a modificar su modo de enseñar.
Usted habla de periodos de aprendizaje. Quizás por desconocimiento, les enseñamos cosas en momentos que no corresponden con su edad
NORA RODRÍGUEZ: Los aprendizajes que ocurren muchos antes de que estén preparados para ello dañan la autoestima y generan altos niveles de estrés. Esto a la vez se convierte en un modo de entender el aprendizaje con dolor, un dolor emocional que impide avanzar. Hoy la pedagogía actual sustituye esto con nuevos recursos, como, por ejemplo, saber cuál es la mejor edad para aprender ciertas cosas.
Ayudamos a los padres a que conozcan el potencial del hijo. Por eso si los progenitores aprenden un poco más sobre la memoria a corto y a largo plazo o sobre la atención, pueden ayudar a su hijo a organizar mejor sus deberes.
Pongamos un ejemplo sobre el tiempo de atención de un niño: este deber ser su edad más «2», lo que significa que, si un niño tiene siete años, sólo puede mantener atención sostenida durante 9 minutos aproximadamente. El cerebro se cansa, y debe hacer recreos cerebrales, como bailar, jugar, cantar…
Habilidades, talentos… ¿cuál es la diferencia? Usted dice que no es extraño que los padres se confundan.
NORA RODRÍGUEZ: Las habilidades se refieren a una capacidad para hacer algo bien, los talentos revelan cuán bien puedo hacerlo, con cuánta frecuencia, pasión, y poco desgaste de energía. Los niños tienen muchas habilidades y más de un talento, generalmente varios, y no son complicados de ver si se exponen a condiciones adecuadas.
Los padres que quieran potenciar las habilidades para que salgan a la luz los talentos, ¿qué tienen que hacer?
NORA RODRÍGUEZ: Poner al alcance de los hijos experiencias y problemas cotidianos. Pueden por ejemplo mostrarles el tamaño de una caja de zapatos y preguntarles si creen que se pueden guardar ahí X cantidad de objetos, y dejar que luego experimenten. De este modo les ayudan a percibir sus capacidades naturales, van a permitirles sentirse satisfechos y exitosos, pero, fundamentalmente, plenos interiormente.
Porque a medida que descubran sus habilidades, averiguarán también aquello que les causa verdadero deleite y placer. La verdadera llama que enciende la motivación proviene del talento, de aquello que te hace brillar. En este sentido: ¡muchos niños son brillantes, aunque sus notas escolares digan lo contrario!
Dice usted que la creatividad hace felices a los niños y que por esto mismo los padres tenemos que tener mucho cuidado con no bloquear su capacidad creativa. ¿cómo no caer en el error?
NORA RODRÍGUEZ: En efecto. Los bloqueadores de creatividad varían en cada etapa, pero hay algunos muy claros. Por ejemplo, cuando impedimos la exploración de los límites, según corresponde a cada edad. O cuando les negamos que estén con otros niños de su edad, o que no realicen actividades al aire libre al menos una vez al día. También es un error interrumpirles en los momentos de juego en solitario, o cuando están atentos a algo que despierta su curiosidad. Las interrupciones provocan frustración y esta, no permite que se relajen a su propio ritmo.
Por ejemplo, cuando los padres llevan a un niño de paseo y se queda extasiado viendo una hormiga, o una mariposa, o cuando van a un museo y le obligan a ver todo lo que hay allí sin que él se tome el tiempo para observar y disfrutar quedándose el tiempo que desee frente a lo que le agrada. Esto transmite la idea de que lo que está haciendo no es importante para el adulto.
Otro error tremendo es presionarles psicológicamente con comparaciones con hermanos, porque el otro baila mejor, lee más rápido, toca mejor un instrumento… O vigilarle. Cuando un niño se da cuenta de que es observado por padres o profesores el impulso creativo y el deseo de probar y arriesgarse se apaga y se esconde.
Recomendamos leer la entrevista completa que, aunque responde a preguntas propias de la educación española, es bueno saber por qué «MUCHOS NIÑOS SON BRILLANTES, AUNQUE SUS NOTAS DIGAN LO CONTRARIO», y nos ser de utilidad para nuestro diálogo con los padres de familia.
REDACCIÓN WEB DEL MAESTRO CMF