En la actualidad, la evaluación formativa ha ganado importancia en el sistema educativo. Se considera que las prácticas en el aula son formativas cuando los docentes y estudiantes utilizan la evidencia del desempeño para tomar decisiones informadas sobre los siguientes pasos en el proceso de enseñanza-aprendizaje.
La evaluación formativa puede realizarse en múltiples ocasiones durante una clase, tanto en situaciones informales como en evaluaciones más estructuradas, como las semanales. A medida que la evaluación formativa se vuelve más frecuente y deliberada, las decisiones pedagógicas se vuelven más informadas y oportunas.
Una evaluación formativa efectiva implica obtener información sobre los aprendizajes de los estudiantes y luego utilizarla para ajustar estrategias, actividades o introducir nuevas. Su propósito se cumple cuando se toman decisiones y se realizan acciones que contribuyen al aprendizaje continuo. Esta evaluación, que monitorea y respalda el aprendizaje, proporciona a los estudiantes información constante para retroalimentar su progreso y logros. Además, ayuda a los docentes a adaptar la enseñanza en función del impacto observado en el proceso de enseñanza-aprendizaje.
El proceso cíclico de fijar objetivos de aprendizaje, evaluar los niveles actuales de comprensión y trabajar estratégicamente para cerrar la brecha entre ellos define la evaluación formativa. A medida que se alcanza una meta de aprendizaje, se establece una nueva, dando continuidad a este proceso.
La evaluación formativa incluye:
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- Proporcionar retroalimentación específica y constructiva a los estudiantes sobre su trabajo y progreso.
- Monitorear el aprendizaje de los estudiantes en tiempo real para identificar áreas de dificultad y necesidades individuales.
- Adaptar las estrategias de enseñanza y el contenido según los resultados de la evaluación para abordar las necesidades de los estudiantes.
- Fomentar la autorreflexión y la autoevaluación entre los estudiantes para que sean conscientes de su propio aprendizaje y establezcan metas realistas.
- Promover un enfoque en el proceso de aprendizaje en lugar de simplemente en los resultados finales.
La evaluación formativa no es:
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- La calificación final o el puntaje que se asigna al final de un período académico.
- Una medida única del desempeño del estudiante.
- Limitada a pruebas o exámenes tradicionales.
- Un proceso aislado del proceso de enseñanza.
- Únicamente responsabilidad del docente; puede involucrar la participación activa del estudiante en su propio proceso de aprendizaje.
Enlace relacionado: Evaluación formativa y Retroalimentación del aprendizaje
10 estrategias innovadoras de evaluación formativa
La evaluación formativa es un enfoque pedagógico que implica recopilar información sobre el proceso de aprendizaje de los estudiantes de manera continua y sistemática. Su objetivo principal es proporcionar retroalimentación oportuna y específica para mejorar el aprendizaje y el rendimiento de los estudiantes. A diferencia de la evaluación sumativa, que se enfoca en la calificación final, la evaluación formativa se centra en el proceso de aprendizaje en sí mismo y busca identificar fortalezas, áreas de mejora y ajustes necesarios en la instrucción.
1. Analizar el trabajo de los estudiantes: Se puede aprender mucho de los deberes, pruebas y exámenes de los estudiantes. Esto es especialmente así si se requiere que los estudiantes expliquen su pensamiento.
Cuando los profesores se toman el tiempo de analizar el trabajo de los estudiantes, adquieren conocimientos sobre:
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- El conocimiento actual de un estudiante, sus actitudes y habilidades sobre el tema.
- Fortalezas, debilidades y estilos de aprendizaje
- Necesidad de asistencia adicional o especial
Este enfoque permite a los maestros modificar su instrucción para ser más efectivos en el futuro.
2. Gráficos de Round Robin y la evaluación formativa: Esta estrategia consiste en pasar gráficos entre los grupos para evaluar la comprensión. Cada grupo de 4 o 5 estudiantes comienza con un gráfico y algunos marcadores.
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- El grupo registra una respuesta a una pregunta abierta.
- También pueden compartir los conocimientos que tienen sobre un tema tratado en clase.
- Una vez que los estudiantes terminan el gráfico, lo pasan al siguiente grupo.
- Una vez que cada grupo ha trabajado en cada gráfico, las respuestas se discuten en clase.
3. Cuestionamiento estratégico
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- Las estrategias de preguntas pueden utilizarse con individuos, grupos pequeños o con toda la clase.
- Las estrategias eficaces de evaluación formativa consisten en pedir a los estudiantes que respondan a preguntas de orden superior como “por qué” y “cómo”. Las preguntas de orden superior requieren un pensamiento más profundo de los estudiantes.
- Pueden ayudar al profesor a discernir el nivel y el alcance de la comprensión de los estudiantes.
4. Resúmenes de 3 vías: La idea aquí es usar diferentes modos de pensamiento y atención a los detalles. Los estudiantes pueden trabajar en grupos o individualmente. En respuesta a una pregunta o tema de investigación, escriben tres resúmenes diferentes:
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- 10-15 palabras de largo.
- 30-50 palabras de largo.
- 75-100 palabras de largo.
Incluso puedes hacer que los estudiantes usen Twitter. Lo más probable es que tengas muchos estudiantes que ya lo usan. Tendrán experiencia comunicando mensajes con un mínimo de palabras y caracteres.
5. Estrategia de Compartir en pareja (Think-pair-share): Esta es una de las muchas estrategias de evaluación formativa que es simple de usar para los docentes. El maestro hace una pregunta, y los estudiantes escriben sus respuestas.
Los estudiantes se colocan en parejas para discutir sus respuestas. Los profesores pueden moverse por el aula y escuchar varios debates. Esto les permite obtener una valiosa visión de los niveles de comprensión.
6. 3-2-1 Cuenta atrás y la evaluación formativa
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- Esta es una verdadera prueba de aprendizaje relevante y significativo.
- Cuando los estudiantes aprenden algo que les resulta útil, es probable que quieran utilizar ese aprendizaje de alguna manera. Haz que tus estudiantes terminen el día con este.
- Deles tarjetas para que escriban, o pueden responder oralmente, completando tres frases por separado.
7. Tres cosas que no sabían antes
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- Dos cosas que te sorprendieron de este tema.
- Una cosa que quieres empezar a hacer con lo que has aprendido.
También puedes hacerles diferentes tipos de preguntas. Estas son sugerencias, así que siéntete libre de hacerles las tuyas.
8. Encuestas en el aula para la evaluación formativa
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- Las encuestas permiten a los estudiantes dar respuestas rápidas y precisas.
- Una encuesta silenciosa es perfecta para aquellos estudiantes “tímidos” que tienen problemas para hablar.
- También son una forma rápida de comprobar la comprensión mediante la tecnología móvil. Prueba herramientas como Poll Everywhere o SurveyPlanet.
9. Boleto o ticket de salida/entrada: Los tickets de salida son pequeños trozos de papel o tarjetas que los estudiantes depositan al salir del aula. Los estudiantes escriben una interpretación exacta de la idea principal de la lección enseñada ese día.
A continuación, proporcionan más detalles sobre el tema.
Los boletos de entrada se hacen al principio de la clase. Los estudiantes pueden responder a las preguntas sobre los deberes, o sobre la lección enseñada el día anterior.
10. Papeles de un minuto: Los trabajos de un minuto suelen hacerse al final del día. Los estudiantes pueden trabajar individualmente o en grupos.
Deben responder a una breve pregunta por escrito. Las preguntas típicas de los profesores se centran en torno a:
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- Punto principal.
- El concepto más sorprendente.
- Preguntas no contestadas.
- El área más confusa de un tema.
- Qué pregunta del tema podría aparecer en la próxima prueba?
Sin evaluaciones formativas, la primera indicación de que un estudiante no comprende es su primer acercamiento al material que suele darse cuando reprueba un examen o una prueba. Así, una estrategia innovadora de evaluación formativa puede expulsar el fracaso de nuestra aula.
Cuáles son las claves para realizar una buena evaluación formativa
Realizar una evaluación formativa efectiva requiere de enfoque, planificación y compromiso para comprender y mejorar el proceso de aprendizaje de los estudiantes. Aquí tienes algunas claves para llevar a cabo una buena evaluación formativa:
- Establecer objetivos claros: Define los objetivos de aprendizaje que deseas alcanzar con tus estudiantes. Estos objetivos guiarán la evaluación y te ayudarán a determinar qué aspectos medir.
- Utilizar múltiples enfoques: Emplea una variedad de métodos de evaluación, como preguntas abiertas, ejercicios prácticos, proyectos, discusiones en grupo y autoevaluaciones. Esto proporcionará una imagen más completa del progreso de los estudiantes.
- Integrar la evaluación en la enseñanza: Diseña actividades de evaluación como parte integral de tus lecciones. La evaluación formativa debe estar entrelazada con la instrucción y no ser un evento aislado.
- Proporcionar retroalimentación específica: Ofrece comentarios detallados y constructivos a los estudiantes. Destaca sus fortalezas y sugiere áreas de mejora con recomendaciones concretas.
- Fomentar la autoevaluación: Motiva a los estudiantes a reflexionar sobre su propio aprendizaje y a evaluar su progreso. Esto los involucrará activamente en su proceso de mejora.
- Ser oportuno: Proporciona retroalimentación en un plazo razonable después de las evaluaciones. La oportunidad permite a los estudiantes aplicar las sugerencias en su aprendizaje continuo.
- Promover el diálogo: Utiliza la retroalimentación como base para discusiones en clase. Anima a los estudiantes a hacer preguntas y aclarar dudas para fomentar la comprensión.
- Ajustar la instrucción: Utiliza los resultados de la evaluación para adaptar tus métodos de enseñanza y abordar las necesidades individuales de los estudiantes.
- Registrar el progreso a lo largo del tiempo: Lleva un registro del rendimiento de los estudiantes a lo largo del tiempo para identificar patrones, avances y áreas persistentes de dificultad.
- Promover un ambiente de apoyo: Crea un ambiente donde los estudiantes se sientan cómodos para cometer errores y buscar ayuda para mejorar. El objetivo es el aprendizaje, no la calificación.
- Enfocarse en el crecimiento: Cambia el enfoque de la calificación a la mejora. Anima a los estudiantes a ver la evaluación como una oportunidad para aprender y crecer.
- Involucrar a los estudiantes: Haz que los estudiantes sean participantes activos en el proceso de evaluación, permitiéndoles tener voz en su aprendizaje y objetivos.
- Flexibilidad: Ajusta tus métodos de evaluación según la dinámica del grupo y las necesidades individuales de los estudiantes.
Al aplicar estas claves, podrás construir un proceso de evaluación formativa que sea enriquecedor y efectivo para los estudiantes, apoyando su crecimiento académico y personal.
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Están bien, lo importante es cambiar la actitud del estudiante y de muchos docentes, nuestro objetivo es enseñar y que se sientan bien aprendiendo, hacer del salón de clase un lugar para preguntar las dudas y resolverlas. Hacer a un lado el ir a la escuela a pasar cursos, a la escuela se va a resolver dudas y con ello a aprender
muy buen contenido y de gran apoyo para la Praxis del docente, aplicables en la dinámica de su accionar en el aula y trabajo diario.