Cómo aplicar un enfoque humanista en nuestras clases

La educación ha experimentado una transformación significativa a lo largo de los años, y uno de los enfoques más influyentes en la pedagogía contemporánea es el Enfoque Humanista en la Educación. Este enfoque, que surge a principios del siglo XX como una reacción a las corrientes conductistas y cognitivistas, se centra en el desarrollo integral de los estudiantes, teniendo en cuenta sus necesidades y características individuales.

Carl Rogers, Abraham Maslow y Carl Jung son algunos de los precursores más destacados de esta perspectiva pedagógica que ha dejado una marca indeleble en la forma en que entendemos y practicamos la educación en la actualidad.

Carl Rogers y el Enfoque Centrado en el Estudiante

El psicólogo estadounidense Carl Rogers fue una de las figuras clave en la formulación del enfoque humanista en educación. Rogers postulaba que los estudiantes son seres activos y curiosos por naturaleza, y que aprenden de manera más significativa cuando se sienten apoyados y motivados. En su visión, el docente no es un mero transmisor de conocimiento, sino un facilitador del aprendizaje, un guía que crea un ambiente de confianza y respeto donde los estudiantes pueden florecer. Para Rogers, la empatía, la escucha activa y la comprensión son habilidades esenciales que un docente debe cultivar para conectar con sus alumnos y fomentar su desarrollo.

Abraham Maslow y la Jerarquía de Necesidades

Otro destacado precursor del enfoque humanista en educación fue Abraham Maslow, conocido por su teoría de la jerarquía de necesidades. Maslow argumentaba que antes de que los estudiantes puedan dedicarse plenamente al aprendizaje académico, sus necesidades básicas, como la alimentación, la seguridad y el sentido de pertenencia, deben estar satisfechas. Esta perspectiva subraya la importancia de abordar las necesidades emocionales y sociales de los estudiantes como un paso fundamental hacia su desarrollo educativo y personal.

Carl Jung y el Desarrollo Personal

El influyente psicólogo suizo Carl Jung también contribuyó al enfoque humanista al destacar la importancia del desarrollo personal. Jung sostenía que el crecimiento de la individualidad y la autoexploración eran fundamentales para el proceso educativo. En este sentido, el enfoque humanista en educación busca promover no solo el conocimiento académico, sino también la autenticidad y la autenticación personal de los estudiantes.

Principios Fundamentales del Enfoque Humanista en Educación

El enfoque humanista en educación se basa en varios principios fundamentales que han moldeado la forma en que se conciben las aulas y las dinámicas de enseñanza:

1. El Estudiante Activo y Curioso: Los estudiantes son seres activos y curiosos que aprenden de manera significativa cuando se sienten apoyados y motivados.
2. El Docente como Facilitador: El docente desempeña el papel de facilitador del aprendizaje, creando un ambiente de confianza y respeto que permite a los estudiantes explorar sus intereses y habilidades.
3. Aprendizaje Individualizado: El aprendizaje se centra en las necesidades y características de cada estudiante, reconociendo que cada uno tiene un camino único hacia el conocimiento.
4. Desarrollo Personal y Social: La educación va más allá de la mera adquisición de conocimientos; también se enfoca en el desarrollo personal y social de los estudiantes.

Aplicación Práctica del Enfoque Humanista

Para llevar a cabo un enfoque humanista en la educación, los docentes pueden seguir prácticas específicas:

1. Conocimiento Individualizado: Conocer a cada estudiante y sus necesidades individuales a través de diagnósticos iniciales y comunicación regular.
2. Ambiente de Confianza: Fomentar un ambiente donde los estudiantes se sientan cómodos para expresar sus ideas y opiniones sin temor al juicio.
3. Fomentar la Autonomía: Promover la autonomía y la autogestión al asignar tareas y proyectos que requieran que los estudiantes tomen decisiones y sean responsables de su propio aprendizaje.
4. Métodos de Enseñanza Activos: Utilizar métodos de enseñanza activos que involucren a los estudiantes en su proceso de aprendizaje.
5. Desarrollo Socioemocional: Priorizar el desarrollo de habilidades socioemocionales, como la empatía, la resolución de conflictos y el trabajo en equipo, en paralelo con el aprendizaje académico.

¿Cuáles son las estrategias efectivas que un docente del siglo XXI puede emplear para implementar con éxito el enfoque humanista en su práctica pedagógica y promover así el desarrollo integral de sus estudiantes?

La aplicación del enfoque humanista en el aula del siglo XXI implica adoptar una perspectiva centrada en el estudiante y un enfoque en el desarrollo integral de cada individuo. Aquí hay algunas estrategias prácticas que un docente del siglo XXI puede emplear para aplicar este enfoque en sus clases:

1. Conocer a tus estudiantes: Investiga sobre las experiencias, intereses y necesidades de tus estudiantes. Realiza encuestas, entrevistas o actividades de diagnóstico al comienzo del año escolar para comprender sus antecedentes y expectativas.
2. Crear un ambiente de confianza y respeto: Fomenta un ambiente en el aula donde los estudiantes se sientan seguros para expresar sus pensamientos, hacer preguntas y cometer errores sin temor a la crítica. Escucha activamente a tus estudiantes y valora sus opiniones.
3. Fomentar la participación activa: Utiliza métodos de enseñanza que involucren a los estudiantes activamente en el proceso de aprendizaje. Los debates, las discusiones en grupo, las actividades colaborativas y los proyectos de investigación son ejemplos de estrategias que promueven la participación activa.
4. Individualizar el aprendizaje: Reconoce que cada estudiante es único y adapta tu enfoque de enseñanza para satisfacer sus necesidades individuales. Esto puede incluir proporcionar opciones de proyectos, tareas diferenciadas o permitir que los estudiantes avancen a su propio ritmo.
5. Promover la autoevaluación y la reflexión: Fomenta la autoevaluación alentando a los estudiantes a reflexionar sobre su propio aprendizaje y establecer metas personales. Proporciona retroalimentación constructiva que les ayude a mejorar.
6. Enseñar habilidades socioemocionales: Reconoce la importancia del desarrollo de habilidades socioemocionales, como la empatía, la comunicación efectiva y la resolución de conflictos. Integra actividades y discusiones que promuevan el crecimiento personal y social.
7. Dar espacio para la autonomía: Ofrece a los estudiantes oportunidades para tomar decisiones y ser responsables de su aprendizaje. Esto puede incluir permitirles elegir temas de proyectos o establecer sus propios objetivos de aprendizaje.
8. Fomentar la creatividad y la exploración: Anima a los estudiantes a explorar sus intereses y pasiones. Proporciona tiempo y recursos para que puedan emprender proyectos creativos y buscar respuestas a preguntas que les intriguen.
9. Apoyar el aprendizaje a lo largo de la vida: Enseña a los estudiantes cómo aprender de manera independiente y cómo buscar recursos para continuar su educación más allá del aula. Promueve una mentalidad de crecimiento y la adquisición de habilidades de autorregulación.
10. Ser un modelo a seguir: Sé un ejemplo de empatía, respeto y curiosidad. Demuestra un compromiso genuino con el bienestar y el desarrollo de tus estudiantes, y muestra interés por su crecimiento tanto académico como personal.

Aplicar el enfoque humanista en la educación del siglo XXI implica cultivar una relación auténtica con los estudiantes, adaptar el proceso de enseñanza para satisfacer sus necesidades individuales y fomentar un ambiente de aprendizaje que promueva el crecimiento integral. Al hacerlo, los docentes pueden ayudar a los estudiantes a desarrollar su potencial como individuos responsables y comprometidos con la sociedad.

¿Cuáles son las metodologías educativas más adecuadas y efectivas para implementar con éxito el enfoque humanista en el aula y así respaldar el desarrollo integral de los estudiantes?

El enfoque humanista en educación se centra en el desarrollo integral de los estudiantes, atendiendo a sus necesidades y características individuales. Para ello, se utilizan metodologías educativas que promueven la participación activa de los estudiantes, el aprendizaje significativo y el desarrollo de habilidades socioemocionales.

A continuación, se presentan algunas metodologías educativas que pueden utilizarse para aplicar el enfoque humanista:

• Aprendizaje basado en proyectos: Los estudiantes trabajan en proyectos que les permiten explorar sus intereses y aplicar sus conocimientos de manera práctica.
• Aprendizaje basado en problemas: Los estudiantes trabajan en problemas reales que les permiten desarrollar sus habilidades de resolución de problemas.
• Aprendizaje basado en la indagación: Los estudiantes investigan un tema para aprender sobre él de una manera profunda.
• Aprendizaje basado en el juego: Los estudiantes aprenden de manera lúdica y divertida.
• Aprendizaje basado en el trabajo colaborativo: Los estudiantes trabajan juntos para aprender de manera colaborativa.
• Aprendizaje basado en la reflexión: Los estudiantes reflexionan sobre su propio aprendizaje para mejorar su comprensión.

Estas metodologías educativas se basan en los siguientes principios del enfoque humanista:

• El estudiante es un ser activo y curioso que aprende de manera significativa cuando se siente apoyado y motivado.
• El docente es un facilitador del aprendizaje que crea un ambiente de confianza y respeto.
• El aprendizaje es un proceso individual que se centra en las necesidades y características de cada estudiante.
• El desarrollo personal y social es tan importante como el aprendizaje de contenidos y habilidades.

Al utilizar estas metodologías educativas, los docentes pueden crear un ambiente de aprendizaje más significativo y enriquecedor para los estudiantes.

Ejemplos concretos de cómo se podría aplicar el enfoque humanista en el aula a través de diversas metodologías educativas

Aquí tiene algunos ejemplos de enfoque humanista por cada metodología:

Aprendizaje basado en proyectos: En una clase de ciencias, los estudiantes pueden trabajar en un proyecto para construir un robot. Este proyecto les permite explorar sus intereses en la ciencia y la tecnología, y aplicar sus conocimientos de física, ingeniería y programación. El docente puede apoyar a los estudiantes en el desarrollo de sus habilidades de investigación, resolución de problemas y trabajo en equipo.

Aprendizaje basado en problemas: En una clase de matemáticas, los estudiantes pueden trabajar en un problema real, como diseñar un sistema de riego para un huerto escolar. Este problema les permite desarrollar sus habilidades de pensamiento crítico y resolución de problemas. El docente puede apoyar a los estudiantes en el desarrollo de sus habilidades de comunicación y colaboración.

Aprendizaje basado en la indagación: En una clase de historia, los estudiantes pueden investigar un tema histórico que les interese. Este proyecto les permite desarrollar sus habilidades de investigación, pensamiento crítico y escritura. El docente puede apoyar a los estudiantes en el desarrollo de sus habilidades de autogestión y organización.

Aprendizaje basado en el juego: En una clase de idiomas, los estudiantes pueden jugar a juegos para aprender vocabulario y gramática. Estos juegos les permiten aprender de manera lúdica y divertida. El docente puede apoyar a los estudiantes en el desarrollo de sus habilidades sociales y emocionales.

Aprendizaje basado en el trabajo colaborativo: En una clase de arte, los estudiantes pueden trabajar en grupos para crear una obra de arte. Este proyecto les permite desarrollar sus habilidades de colaboración y comunicación. El docente puede apoyar a los estudiantes en el desarrollo de sus habilidades de empatía y resolución de conflictos.

Aprendizaje basado en la reflexión: En una clase de educación física, los estudiantes pueden reflexionar sobre su propio rendimiento en un juego. Esta reflexión les permite aprender de sus errores y mejorar su rendimiento. El docente puede apoyar a los estudiantes en el desarrollo de sus habilidades de autoconocimiento y autorregulación.

Estos son solo algunos ejemplos, y hay muchas otras maneras de aplicar el enfoque humanista en educación. Lo importante es que las metodologías educativas se centren en las necesidades y características individuales de los estudiantes, y que promuevan el aprendizaje significativo y el desarrollo personal y social.

7 características cualitativas de la formación humanista en la NEM

Para la NEM, la realidad actual de la educación en México requiere de cambios radicales, como reformar al anterior modelo educativo “en el que se asumía al profesor como culpable de las deficiencias, con contenidos irrelevantes para la educación”.³

Esto motivó a la creación de una gran consulta a través de foros abiertos, donde fueron precisamente las maestras y maestros, personal directivo, estudiantes, familiares y especialistas, quienes diseñaron las bases teóricas de la Nueva Escuela Mexicana.

Es por este motivo que vale la pena poner especial atención a las características de la formación humanista, para comprender además la influencia, los beneficios y el alcance que tendrá la NEM en la educación actual en México.

1. Aprendizaje integral

   El objetivo central es romper con la limitada visión del aprendizaje como un simple proceso sistemático de adquisición de conocimientos, sino convertirlo en un entorno de carácter inclusivo, pluricultural, colaborativo y equitativo.

   En este sentido, destacará el pensamiento crítico, el aprecio a la interculturalidad, la visibilización de la equidad e igualdad de género, así como el fomento de prácticas para una vida saludable, y la apropiación de elementos estéticos para apreciar el arte y la cultura.

2. Educación centrada en la comunidad y no en el alumno

   La visión del alumno competitivo ha generado una tendencia al individualismo que, desde la perspectiva de la Nueva Escuela Mexicana, no ha dado los resultados esperados, ya que ha habido durante décadas un vacío pedagógico en todo al fomento del aprendizaje colaborativo.

   Esto resulta fundamental, sobre todo si tomamos en cuenta que una de las habilidades interpersonales más apreciadas en la sociedad actual consiste en saber participar y trabajar en equipo.

   Es por eso que la formación humanista pondera que el estudiante no sea el protagonista directo o central del aprendizaje, sino que se vuelva parte de un proceso pedagógico orientado por el docente, para ejercitar nuevas dinámicas de aprendizaje en donde la interacción con la comunidad local sea parte de su desarrollo.

3. Pedagogía con responsabilidad social

   La filosofía de formación humanista integrada a la NEM además se suscribe orgánicamente a los Objetivos del Desarrollo Sostenible (ODS) y a la Agenda 2030 de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) en su cuarto apartado “Educación de Calidad”.

   Así como la Unesco declara el derecho inalienable de todo niño y niña por recibir una educación de calidad, la NEM asume además que debe ser un instrumento de desarrollo con un principal enfoque en los sectores más vulnerados socioeconómicamente.

4. Mayor libertad de cátedra y ejecución didáctica

   El perfil del docente en la Nueva Escuela Mexicana se encamina a ofrecer una educación más integral, humana y personalizada “así como al logro de aprendizajes relevantes para su vida presente y futura”.⁴

   Es por ello que la reforma de la NEM puso especial énfasis en la autonomía profesional del magisterio, que “representa la libertad que tienen las maestras y los maestros para ejercer y reinventar la docencia, intercambiar experiencias, problematizando la realidad a través de los conocimientos y saberes que se enseñan a lo largo del ciclo escolar, como condición para desarrollar sus aprendizajes”.⁵

5. Integración de conocimientos aplicados al entorno

   Como ahora sabemos, el modelo de aprendizaje por competencias surgió a partir de la tendencia a satisfacer la demanda de personal capacitado, sobre todo para atender a las necesidades de una sociedad marcada por el acelerado crecimiento informático y la llegada de Internet.Las características de una formación humanista de la Nueva Escuela Mexicana busca cambiar esta tendencia, asumiendo que el alumno tiene derecho a una formación más integral, en donde sea copartícipe de un proceso que involucra además a toda su comunidad, observando y analizando sus necesidades locales e inmediatas, ampliando las posibilidades de un aprendizaje participativo, personalizado y homogéneo.

6. Evaluación no sólo numérica sino valorativa y global

   Durante el proceso de diseño e implementación de la Nueva Escuela Mexicana, se tenía la idea de que se eliminarían las calificaciones, pero no es así. La calificación seguirá vigente como parte del proceso de evaluación sumativa, que tiene el objetivo analizar y “tomar decisiones relacionadas con la acreditación de los alumnos”.

   El objetivo real es ampliar las cualidades de la valoración, dándole también una habilidad cualitativa y no solo sumatoria, de manera que el estudiante pueda observar y comprender su progreso a su propio ritmo y estilo de aprendizaje.

   El actual modelo de evaluación no solo es reduccionista, sino poco preciso, a partir de que se basa principalmente en la revisión de actividades, tareas y evidencias del trabajo del estudiante, mas no en su formación integral.

7. Transversalidad educativa

   Romper con la segmentación del conocimiento, en beneficio de una formación realmente integral, que interactúe con todas las áreas de aprendizaje.

   En la Nueva Escuela Mexicana, las asignaturas divididas materias, o áreas de conocimiento específico, como Matemáticas, Física, Química o Biología, en su lugar estarán regidos por cuatro ejes o campos formativos:

   • Saberes y Pensamiento Científico
   • Ética, Naturaleza y Sociedades
   • De lo Humano y lo Comunitario
   • Lenguajes

Lecturas recomendadas: 

A continuación, se presentan algunas recomendaciones de libros y lecturas para docentes que quieran aplicar el enfoque humanista:

• “Enseñar para la libertad” de Carl Rogers. Este libro es un clásico del enfoque humanista en educación. Rogers propone un modelo educativo centrado en el estudiante, en el que el docente es un facilitador del aprendizaje.
• “La educación centrada en el alumno” de Abraham Maslow. Este libro presenta la teoría de la autorrealización de Maslow, que enfatiza la importancia del desarrollo personal y la motivación intrínseca.
• “Educación y desarrollo humano” de Howard Gardner. Este libro presenta la teoría de las inteligencias múltiples de Gardner, que propone que las personas tienen diferentes tipos de inteligencia.
• “La escuela de la vida” de Ken Robinson. Este libro explora la importancia de la creatividad y la innovación en la educación.
• “La educación emocional” de Daniel Goleman. Este libro presenta la importancia de las habilidades socioemocionales en el aprendizaje y la vida.

Además de estos libros, también hay una gran cantidad de artículos y recursos en línea que pueden ayudar a los docentes a aplicar el enfoque humanista. Algunos recursos útiles son:

• El Centro de Enseñanza Humanista. Este centro ofrece recursos y formación para docentes que quieran aplicar el enfoque humanista.
• La Red Latinoamericana de Educación Humanista. Esta red reúne a educadores humanistas de toda América Latina.
• El blog de Educación Humanista. Este blog ofrece recursos y reflexiones sobre el enfoque humanista en educación.

El enfoque humanista en educación es una filosofía educativa que puede ayudar a los docentes a crear un ambiente de aprendizaje más significativo y enriquecedor para los estudiantes. Al centrarse en las necesidades y características individuales de los estudiantes, los docentes pueden contribuir a su desarrollo como personas integrales.

Conclusión

El enfoque humanista en la educación ha revolucionado la forma en que concebimos la enseñanza y el aprendizaje. Al centrarse en el estudiante como individuo y en su desarrollo integral, este enfoque busca no solo crear estudiantes exitosos en el sentido académico, sino también individuos auténticos, comprometidos y responsables con la sociedad. Los precursores de este enfoque, como Carl Rogers, Abraham Maslow y Carl Jung, han dejado un legado duradero que continúa influyendo en la pedagogía contemporánea, promoviendo una educación que va más allá de la transmisión de conocimientos, hacia la formación de seres humanos completos y comprometidos con su propio crecimiento y el bienestar de la sociedad.

Bibliografía:

Cómo nace el enfoque humanista en educación

• Rogers, C. R. (1969). Freedom to learn: A view of what education might become. Columbus, OH: Merrill.
• Maslow, A. H. (1968). Toward a psychology of being. New York, NY: Van Nostrand Reinhold.
• Jung, C. G. (1964). Man and his symbols. New York, NY: Dell.

Recomendaciones de libros y lecturas para docentes que quieran aplicar el enfoque humanista

• Gardner, H. (1983). Frames of mind: The theory of multiple intelligences. New York, NY: Basic Books.
• Robinson, K. (2006). The element: How finding your passion changes everything. New York, NY: Penguin Books.
• Goleman, D. (1995). Emotional intelligence: Why it matters more than IQ. New York, NY: Bantam Books.

REDACCIÓN WEB DEL MAESTRO CMF

Recomendamos a la Comunidad Educativa Digital tener en cuenta que, el enlace y/o la carpeta en donde están alojados los libros, recursos y/o materiales, no es administrado por la Web del Maestro CMF, pueda ser que en cuestión de días (o según el tiempo transcurrido desde su publicación), los enlaces no funcionen y el material ya no se encuentre disponible. Gracias por su comprensión.

ENLACE DE LECTURA: EDUCACIÓN HUMANISTA HOY

Si te sirvió el material, apóyanos con un clic. Nos ayudará a mantener el servicio. ¡Comparte y así más docentes utilizarán estos recursos gratis! Muchas gracias.