Papa Francisco: Ciertos niños, a pesar de las dificultades, pueden seguir recibiendo una educación escolar, mientras que para muchísimos otros esta se ha interrumpido bruscamente

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Para quienes estamos en la tarea educativa, tenemos la trascendental tarea de informar, instruir, compartir conocimientos, proponer valores, apoyar el desarrollo y la consolidación de criterios reflexivos y propios a los estudiantes. Cambiemos el enfoque de una educación pasiva, repetitiva y memorística, por la de padres de familia y profesores que formándose permanente, por lectura y la escucha de los otros, sin prejuicios, ni mezquindades, son capaces de formarse un criterio personal y desde allí proponer el discernimiento a los niños y jóvenes; quienes necesitan realizar acciones libres y responsables, después de una reflexión personal según su edad, con la orientación que les inculcan sus padres y educadores, “cuando todavía no ha logrado descubrir por sí mismos lo que es bueno, lo que le conviene”. BERNABÉ TIERNO: SIN OBEDIENCIA, SIN DISCIPLINA Y SIN AUTORIDAD NO HABRÁ JAMÁS VERDADERA EDUCACIÓN

El Papa Francisco desde su tarea evangelizadora, nos propone unas reflexiones sobre “el destino universal de los bienes y la virtud de la esperanza”, en los momentos actuales de emergencia sanitaria, económica, política, educativa y social, y que consideramos podrían ser útiles, para los educadores que de buena voluntad quieran escucharlo y considerar sus enseñanzas, como recurso educativo.

“Ante de la pandemia y sus consecuencias sociales, muchos corren el riesgo de perder la esperanza” ·.

Cristo “nos ayuda a navegar en las aguas turbulentas de la enfermedad, de la muerte y de la injusticia, que no tienen la última palabra sobre nuestro destino final”.

“La pandemia ha puesto de relieve y agravado problemas sociales, sobre todo la desigualdad”.

“Algunos pueden trabajar desde casa, mientras que para muchos otros esto es imposible”.
“Ciertos niños, a pesar de las dificultades, pueden seguir recibiendo una educación escolar, mientras que para muchísimos otros esta se ha interrumpido bruscamente”.

RESUMEN DE LA CATEQUESIS (26/08/2020) (03 02”)

“Algunas naciones poderosas pueden emitir moneda para afrontar la emergencia, mientras que para otras esto significaría hipotecar el futuro”.
“Estos síntomas de desigualdad revelan una enfermedad social; es un virus que viene de una economía enferma. Tenemos que decirlo sencillamente: la economía está enferma. Se ha enfermado”.
“Esta es la enfermedad: el fruto de un crecimiento económico injusto, que prescinde de los valores humanos fundamentales”.
“Este modelo económico es indiferente a los daños infligidos a la casa común. No cuida de la casa común”.
“La desigualdad social y el degrado ambiental van de la mano y tienen la misma raíz: la del pecado de querer poseer, de querer dominar a los hermanos y las hermanas, de querer poseer y dominar la naturaleza y al mismo Dios”.
«Cada comunidad puede tomar de la bondad de la tierra lo que necesita para su supervivencia, pero también tiene el deber de protegerla»
Es nuestro deber hacer que sus frutos [de la tierra] lleguen a todos, no solo a algunos. Y este es un elemento-clave de nuestra relación con los bienes terrenos.
“Para asegurar que lo que poseemos lleve valor a la comunidad, «la autoridad política tiene el derecho y el deber de regular en función del bien común el ejercicio legítimo del derecho de propiedad»”.
[Cuando] las propiedades, el dinero los transformamos fácilmente en fines, individuales o colectivos, es cuando se socavan los valores humanos esenciales.
“Cuando la obsesión por poseer y dominar excluye a millones de personas de los bienes primarios; cuando la desigualdad económica y tecnológica es tal que lacera el tejido social; y cuando la dependencia de un progreso material ilimitado amenaza la casa común, entonces no podemos quedarnos mirando”.
“Nosotros estamos viviendo una crisis. La pandemia nos ha puesto a todos en crisis”.
“De una crisis no se puede salir iguales, o salimos mejores, o salimos peores. Esta es nuestra opción”.
“Después de la crisis, ¿seguiremos con este sistema económico de injusticia social y de desprecio por el cuidado del ambiente, de la creación, de la casa común?”.
“Si cuidamos los bienes que el Creador nos dona, si ponemos en común lo que poseemos de forma que a nadie le falte, entonces realmente podremos inspirar esperanza para regenerar un mundo más sano y más justo”.
“Lean las estadísticas: cuántos niños, hoy, mueren de hambre por una no buena distribución de las riquezas”.
“Que [la] imagen, de los niños necesitados por hambre y por falta de educación, nos ayude a entender que después de esta crisis debemos salir mejores”.

Estas frases han sido tomadas del mensaje del Papa Francisco el 26 de agosto de 2020, y lo puede Usted encontrar completo en este enlace: EL DESTINO UNIVERSAL DE LOS BIENES Y LA VIRTUD DE LA ESPERANZA