En los últimos años, ha habido un cambio notable en la percepción de las responsabilidades del hogar, desafiando los estereotipos arraigados de género. En este contexto, ¿te imaginas aprender a lavar ropa o planchar en la escuela? El Colegio Montecastelo en Vigo, España, ha dado un paso audaz al incluir en su plan de estudios una materia poco convencional llamada “Home Skills”, donde los estudiantes aprenden habilidades prácticas como coser y cocinar.
Las imágenes compartidas por la institución muestran a los jóvenes participando activamente en la clase de planchado de ropa, guiados por un profesor que les enseña la técnica adecuada. “Padres y profesores se encargan de ello, siendo un auténtico reto para los alumnos que, de repente, se las tienen que ver con una plancha y sus diferentes ajustes según el tipo de ropa”, compartió la institución en sus redes sociales.
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Equipados con mandiles, los estudiantes se enfrentan a diversos desafíos prácticos, desde poner prendas de vestir a remojo para un lavado a mano hasta aprender a cocinar, mostrando entusiasmo y disposición para adquirir nuevas habilidades.
Esta iniciativa surge como respuesta a una preocupación social: muchos jóvenes llegan a la adultez sin las habilidades básicas para manejar sus hogares, lo que puede afectar su independencia y calidad de vida. Además, aborda la falta de participación de los jóvenes en las tareas domésticas, un problema observado por muchos padres que atribuyen esto a la falta de participación desde una edad temprana en estas actividades.
La materia también se ha convertido en un espacio para desafiar los roles de género tradicionales y promover la igualdad. El objetivo es educar a hombres y mujeres que compartan equitativamente las responsabilidades del hogar en el futuro. Con la mirada puesta en el futuro, el colegio planea expandir el programa para incluir más habilidades y actividades que tradicionalmente se han asociado con un género específico.
El impacto de esta iniciativa ha sido significativo, generando un gran interés en las redes sociales y recibiendo múltiples comentarios positivos. Muchos han pedido que este tipo de enseñanza se implemente en más escuelas en todo el mundo, reconociendo su potencial para beneficiar a las generaciones más jóvenes al proporcionarles habilidades prácticas y promover la igualdad de género desde una edad temprana.
REDACCIÓN WEB DEL MAESTRO CMF
