Maestros al servicio de la educación

Cuando los maestros ganen más que las estrellas del fútbol iremos hacia un mundo mejor

La remuneración de los docentes es un tema relevante en el ámbito educativo y social. Si bien es cierto que los salarios de los docentes en muchos países no reflejan la importancia y el impacto de su labor, establecer una comparación directa entre los ingresos de los maestros y las estrellas del fútbol puede ser complicado. Los salarios en el deporte profesional, especialmente en el fútbol, son determinados por una serie de factores, incluyendo la demanda del mercado, contratos publicitarios y otros ingresos asociados. Por otro lado, la remuneración de los docentes depende de diversas variables, como el presupuesto destinado a la educación y las políticas salariales adoptadas por los gobiernos.

Es importante reconocer que mejorar los salarios de los docentes es una meta deseable, ya que esto podría atraer a más personas talentosas y comprometidas a la profesión docente, y ayudar a retener a los profesionales experimentados. Un salario justo y competitivo para los docentes podría contribuir a elevar la calidad de la educación, alentar la dedicación y mejorar la motivación de los maestros.

Sin embargo, alcanzar un mundo mejor no se reduce únicamente a equiparar los salarios entre distintas profesiones. También es necesario abordar otros desafíos relacionados con la educación, como la inversión en infraestructura, recursos pedagógicos, formación docente continua, equidad educativa y respeto por los derechos laborales de los maestros. Además, es fundamental reconocer y valorar la importancia de la educación en sí misma, independientemente de las diferencias salariales.

La remuneración de los docentes es un aspecto relevante a considerar en la búsqueda de una educación de calidad y un mundo mejor. Sin embargo, lograrlo implica abordar de manera integral y sistémica los desafíos educativos, fomentando políticas que valoren y respalden la labor de los maestros, y promoviendo la inversión adecuada en el sistema educativo en su conjunto.

Emilio Calatayud se licenció en Derecho en la Universidad de Deusto, y se inició la carrera judicial, fue destinado primero a Tenerife y más tarde a Granada, donde alcanzó el grado de magistrado. Es titular del Juzgado de Menores de Granada y decano de los juzgados de esta ciudad que ha suscitado mucha polémica siempre por dictar sentencias basadas en la educación y trabajo social en lugar de la privación de libertad.

Algunos de los ejemplos de sus sentencias más polémicas son: impartir 1000 horas de clases de informática a estudiantes a un joven que había crackeado varias empresas granadinas provocando daños por 2000 euros, 100 horas de servicio a la comunidad patrullando junto a un policía local por haber conducido temerariamente y sin licencia o 50 horas dibujando un cómic de 15 páginas, en el que cuenta la causa por la que le condenaban.

Ha publicado libros sobre sus propias sentencias, calificadas de ejemplares y educativas.

Es esta oportunidad queremos compartir con fines únicamente educativos la siguiente publicación, donde el juez Emilio Calatayud de 64 años comenta sobre la amistad entre docentes y alumnos.

Esperamos que el siguiente comentario, corto pero muy significativo, sirva de reflexión para los docentes, las autoridades educativas y las familias.

“Buenas, soy Emilio Calatayud. Si queremos tener un mundo mejor, debemos empezar a hacer mejor las cosas. Eso no se improvisa. Cuando, por ejemplo, los maestros ganen más que las estrellas de fútbol iremos hacia un mundo mejor. Es una locura, dirán algunos. Bendita locura digo yo.”

Estos son otros artículos del Juez de menores Emilio Calatayud.

Este contenido ha sido publicado originalmente por Emilio Calatayud en la siguiente dirección: granadablogs.com



Comparte este artículo
Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

También puede leer:





Se desactivó la función de seleccionar y copiar en esta página.