¿Cómo desarrollar hábitos de atención en el aula?

En el aula, la atención no es solo un requisito deseable, es la verdadera puerta de entrada al aprendizaje. Como afirma Peps Mccrea (2020): «La atención es la puerta de entrada al aprendizaje».

Sin atención, difícilmente el conocimiento logra consolidarse. Sin embargo, los ambientes escolares están cargados de estímulos que compiten constantemente por el foco atencional de los estudiantes. Además, el cerebro humano —y en especial el de niños y adolescentes— está programado para distraerse fácilmente (Stevens & Bavelier, 2011). Este rasgo, valioso en términos de supervivencia, representa un desafío diario en el aula.

Pero hay una buena noticia: los hábitos de atención pueden enseñarse, desarrollarse y consolidarse mediante estrategias prácticas.

¿Por qué son importantes los hábitos de atención?

Diversas investigaciones indican que la atención, además de ser individual, puede generar contagio. Es decir, cuando un estudiante presta atención, los que lo rodean tienen más probabilidades de hacer lo mismo (Innedrive, 2024; Forrin et al., 2024). Por ello, generar entornos donde estas conductas se practiquen favorece el aprendizaje grupal.

El desafío es claro: ¿cómo lograr que más estudiantes adopten estos comportamientos de forma natural y sostenida?

Rutinas y hábitos: la diferencia que transforma el aprendizaje

Según Fletcher-Wood (2024), es clave distinguir entre rutinas y hábitos:

  • Rutinas: acciones guiadas por instrucciones del docente (por ejemplo, levantar la mano para pedir silencio).
  • Hábitos: acciones automáticas, mantenidas en el tiempo, que ya no requieren instrucción directa (por ejemplo, prestar atención cuando un compañero habla).

El objetivo es que la atención se convierta en un hábito que no dependa de la fuerza de voluntad ni de la motivación momentánea, sino de automatismos consolidados. Como explica Doug Lemov (2022): «Una rutina conocida le permite no recurrir a su fuerza de voluntad para esas acciones, lo que permite destinarla a algo más».

Así como un deportista entrena hasta que ciertos movimientos son automáticos, los docentes pueden guiar a los estudiantes para que prestar atención se vuelva natural.

Los entornos condicionan los hábitos

Los contextos escolares tienen un peso directo en los hábitos de atención. En un entorno favorable, los estudiantes desarrollan mayor capacidad de concentración; en uno desordenado, la distracción es constante.

Por ello, el rol del docente no es solo enseñar contenido, sino también construir sistemáticamente el ambiente propicio para el aprendizaje.

Doug Lemov lo resume de forma precisa: «Prestarle atención a la atención, construyendo hábitos para mantener el foco, es una de las cosas más importantes que pueden hacer los profesores» (Lemov, Enseña como un maestro 3.0).

Estrategias prácticas para el aula

1. Hábitos de atención: una comunidad enfocada

Doug Lemov y su equipo proponen técnicas concretas para consolidar hábitos de atención:

    • Cuando un compañero habla, todos giran su cuerpo hacia él.
    • Señales con las manos para apoyar a compañeros que necesitan ayuda (por ejemplo, mover los dedos en su dirección).
    • Gestos de aprobación, como pulgares arriba o chasquidos silenciosos, en vez de aplausos.
    • Contacto visual constante con el hablante.

Estas prácticas no solo mejoran el foco atencional, también fortalecen la pertenencia al grupo, clave para un clima emocional seguro.

Un punto esencial es involucrar a los propios estudiantes en la definición de estas señales, adaptándolas a la cultura de cada aula.

2. Hábitos de discusión: construyendo pensamiento colaborativo

Los hábitos de atención crean las bases para mejorar la participación y el nivel de pensamiento:

    • Los estudiantes aprenden a escuchar activamente.
    • Parafrasean lo dicho por sus compañeros.
    • Expresan acuerdos o desacuerdos argumentados.
    • Construyen ideas colectivamente.

Este proceso exige acompañamiento docente constante, con intervenciones como: «Espera… ¿estás de acuerdo? ¿Qué dijo tu compañera?» o «Entonces…»

El docente guía, modela y corrige, hasta que estos intercambios se vuelven fluidos.

La importancia de la práctica sostenida

Convertir estas rutinas en hábitos requiere:

  • Práctica continua: repetir sistemáticamente las estrategias.
  • Consistencia entre docentes: que todos los profesores del establecimiento apliquen los mismos principios.
  • Adaptación progresiva: ir incorporando variaciones según el avance de los estudiantes.

Como señala Bambrick-Santoyo (2019), lo fundamental es que estas estrategias formen parte de la cultura institucional.

Conclusión: el camino hacia el aprendizaje profundo

Desarrollar hábitos de atención no es un evento puntual, sino un proceso sostenido que transforma no solo el aprendizaje, sino también la cultura emocional del aula.

En definitiva, los docentes tienen la capacidad de formar hábitos de atención y discusión que permitirán a sus estudiantes no solo aprender mejor, sino pensar con mayor profundidad, interactuar respetuosamente y construir aprendizajes duraderos.

Bibliografía consultada

  • Bambrick-Santoyo, P. (2019). Leverage Leadership 2.0: A Practical Guide to Building Exceptional Schools.
  • Fiorella, L. (2020). The science of habit and its implications for student learning and well-being. Educational Psychology Review, 32(3), 603–625.
  • Forrin, N. D., et al. (2024). Investigating attention contagion between students in a lecture hall. Scholarship of Teaching and Learning in Psychology.
  • Fletcher-Wood, H. (2024). Habits for Learning.
  • Hidi, S., & Harackiewicz, J. M. (2000). Motivating the academically unmotivated. Review of Educational Research, 70(2), 151–179.
  • Lemov, D. (2022-2023). Enseña como un maestro 3.0, Volver a vincularnos.
  • Mccrea, P. (2020). Attention: The gateway to learning.
  • Stevens, C., & Bavelier, D. (2011). The role of selective attention on academic foundations: A cognitive neuroscience perspective. Developmental Cognitive Neuroscience.

REDACCIÓN WEB DEL MAESTRO CMF

MATERIA DE DESCARGA: CLAVES PARA POTENCIAR LA ATENCIÓN / CONCENTACIÓN 


Add a Comment

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Manténgase informado sobre los hechos clave del mundo educativo.

Al presionar el botón Suscribirse, confirma que ha leído y acepta nuestra Política de privacidad




Se desactivó la función de seleccionar y copiar en esta página.