El reciente Índice Nacional de Bienestar de Docentes, elaborado por centros de estudios de la Universidad del Desarrollo (UDD) y la Universidad San Sebastián (USS), junto a la Fundación Santillana y Elige Educar, revela un panorama preocupante sobre la realidad que enfrentan los profesores en Chile. El estudio, difundido por Emol, muestra una combinación de desgaste emocional, problemas de salud mental y un clima escolar cada vez más tenso.
Dimensión psicológica: una profesión bajo presión
Más de la mitad de los docentes (51,6%) declara que su estado de ánimo dificulta, aunque sea “un poco”, relacionarse con otros. Además, un 22,9% indica que les resulta “muy” o “extremadamente difícil” realizar su trabajo cotidiano.
Los indicadores de salud mental son especialmente alarmantes: el 32,8% de los educadores reporta síntomas leves, mientras que casi uno de cada cinco (18,6%) presenta un cuadro moderado y un 19% adicional reconoce síntomas entre moderadamente severos y severos.
Cuando se mide la respuesta emocional frente a la enseñanza, los resultados muestran una clara tensión interna: el disfrute obtiene un promedio de 3,45 puntos (de un máximo de 5), mientras que el enojo y la ansiedad alcanzan 1,78 y 1,92 respectivamente. Esto evidencia que, aunque persiste la vocación y el gusto por enseñar, el malestar psicológico y la sobrecarga emocional continúan minando la motivación docente.

Clima escolar: convivencia en riesgo
El estudio también analiza la percepción sobre la convivencia dentro de los establecimientos educacionales. El 45,6% de los profesores la califica como “buena”, pero un 35,6% la considera solo “regular”. Incluso un 8,1% afirma que la convivencia es “mala” o “muy mala”.
El dato más preocupante es que 4 de cada 10 docentes asegura haber sido agredido por algún estudiante. En concreto, el 60,2% dice no haber sufrido agresiones, pero el 39,8% restante reconoce haberlas vivido con distinta frecuencia: un 25,3% dos o tres veces durante el período, un 8% al menos una vez al mes y un 6,6% con mayor regularidad.
La sensación de seguridad también se ha visto afectada: el 23,9% de los educadores declara no sentirse seguro en su lugar de trabajo, lo que refleja un clima escolar deteriorado que impacta directamente en el bienestar emocional y profesional del cuerpo docente.
Un llamado urgente a la protección y al apoyo docente
El Índice Nacional de Bienestar Docente pone en evidencia que la docencia en Chile atraviesa una crisis profunda. La combinación de estrés, problemas de salud mental y violencia escolar no solo amenaza el bienestar personal de los profesores, sino también la calidad del aprendizaje y el clima educativo de los establecimientos.
La protección de los docentes, la promoción de políticas de salud mental laboral y la mejora de la convivencia escolar son desafíos urgentes. Las cifras no deben verse como simples estadísticas, sino como una advertencia sobre el costo humano de una profesión esencial para el país.
Fuente: Emol.com – “Bienestar docente en Chile: Estudio revela que 4 de cada 10 profesores han sido agredidos por estudiantes”.
Infografía: Michel Leiva M. | Contenido: Vladimir Núñez | Laboratorio de Investigación e Innovación Docente de la Universidad San Sebastián (LIID-USS); Instituto de Bienestar Socioemocional (IBEM); Centro de Innovación en Liderazgo Educativo (CILED-UDD); Elige Educar; Fundación Santillana.
Redacción | Web del Maestro CMF






