Maestros al servicio de la educación

Consejos para los educadores de niños distraídos

Los problemas de atención en edad preescolar tienen una relación directa con el fracaso académico. Esta es una de las principales conclusiones que destaca un reciente estudio realizado por la Universidad de California Davis. La investigación, en la que han participado cerca de 700 niños durante más de 20 años, revela que el déficit o la falta de atención puede frenar el aprendizaje. Cuando esto ocurre desde la etapa preescolar, es probable que afecte al rendimiento en ciclos educativos posteriores.

“Hay niños que se distraen con un ruido, una luz o con sus propios pensamientos. Les cuenta concentrarse y esto hace que vayan más lentos a la hora de aprender conocimientos. […] van a un ritmo más lento porque se despistan y no prestan la suficiente atención”, sostiene Estefanía Esteban redactora de GuiaInfantil.com. ¿Qué hacer?

El artículo dela redacción de la plataforma virtual PADRES E HIJOS de México, que compartimos con fines únicamente educativos – pastorales, nos propone cinco sugerencias para ayudarlo a poner más atención dentro y fuera del salón de clases.

5 tips para ayudar a niños distraídos

Si alguna vez te han dicho que tu niño no presta atención en clase, aquí te damos algunos consejos para ayudar a niños distraídos.

Hay niños que les cuesta mucho trabajo concentrarse, pues se distraen por cualquier cosa, ya sea un ruido, una luz o con sus propios pensamientos. Simplemente, a cualquier despiste no prestan la suficiente atención.

Enlace relacionado: Música Alegre para Niños: ¡Descarga Gratuita y Libre de Derechos!

Cuando un niño es distraído, su proceso de aprendizaje es menos provechoso. Adquiere conocimientos de forma más lenta y las tareas pueden ser insuperables. Sin embargo, no es  recomendable regañar al niño, pues podría sentirse fracasado y culpable. Por ello, es importante ayudarlo a que presta más atención dentro y fuera del salón de clases. Sigue estos consejos.

  1. Asegúrate de que tu niño duerma y descanse lo suficiente, de lo contrario, no podrá rendir bien en el colegio.
  2. Cuando hables con él o le pidas algo, míralo a los ojos. Así, te asegurarás de que te está entendiendo.
  3. Cuando realice la tarea en casa, aparta de su vista las cosas que le puedan distraer, como luces, juguetes, teléfono, etc. Y respeta siempre un mismo horario. Crea una rutina para realizar su tarea todos los días, así logrará concentrarse en lo que está haciendo. No dejes las tareas más difíciles para el final. Estará cansado y perderá el interés por esforzarse.
  4. Anímalo a que resuma con frases cortas lo que acaba de hacer. De esta forma, tratará de concentrarse y hacer memoria.
  5. Para ejercitar la memoria de tu niño, lo idea es jugar con él juegos de memoria y concentración.

Recuerda tenerle mucha paciencia, pues es la mejor forma de ayudarlo a que poco a poco logre concentrarse, pues los resultados no serán de inmediato, pero con mucho cariño y esfuerzo, tu peque dejará de ser un niño distraído.

niños

Ejercicios y actividades

En la web “Orientación Andujar” se recoge un amplio listado de ejercicios para mejorar la atención. De utilidad para padres y docentes, se pueden descargar y emplear en el momento en el que se necesiten. En “Psicología y Pedagogía”, blog de especialistas en estas disciplinas (infantil y juvenil), se recomiendan un buen número de juegos clásicos, como puzzles, dominó o cartas, para entrenar la atención con los más pequeños.

Además de los recursos que se encuentran en Internet, en casa se pueden realizar otras muchas actividades sencillas, aconsejadas por los orientadores y que ayudan a los padres a potenciar la capacidad de atención de sus hijos:

  • Enumerar tres, cuatro o cinco cosas (según la edad) que puede encontrar en casa y pedirle que las traiga para comprobar que ha atendido al listado.
  • Decirle una palabra o un número. A continuación, recitar un listado de palabras o números, entre los que se encuentre el anterior, y pedirle que haga una señal cuando lo escuche.
  • Colocar diferentes elementos en una mesa, en un orden determinado. Variar luego el orden para que vuelva a colocarlos en el modo inicial.
  • Guardar varios objetos en una caja, cerrarla y pedirle que repita el nombre de todos los objetos que están en su interior.
  • Disfrazarse con varios adornos y quitarse algunos para que descubra cuáles han desaparecido.

Qué puede hacer el profesor

Captar la atención de los alumnos en clase es uno de los primeros retos a los que se enfrentan los docentes en el aula. El psicopedagogo Juan Vaello Orts, autor, entre otras obras, del libro ‘Cómo dar clase a los que no quieren’, considera que en el ámbito escolar se distinguen dos tipos de atención: la del alumnado, que debe ser concentrada en torno a la tarea o al profesor, y la del docente, que debe distribuirse entre todos los estudiantes por igual. Vaello apunta diferentes estrategias para captar la atención y para mantenerla:

  • Asegurar la atención de todos los alumnos y no comenzar la clase hasta haberlo conseguido.
  • Advertir al alumno distraído de manera individual, llamarle por su nombre. Si este paso es ineficaz, conviene hacer una advertencia personal privada.
  • Detectar los elementos que pueden distraer a los estudiantes e intentar anularlos.
  • Colocar a los alumnos de menor rendimiento más cerca del docente.
  • Iniciar la clase con actividades que favorezcan la atención, como preguntas breves sobre la clase anterior o ejercicios prácticos.
  • Utilizar distintas formas de presentación de los contenidos de la materia, como lecturas, videos, etc. Variar las tareas que deben realizar los estudiantes para evitar la monotonía.
  • Detectar cuáles son las metodologías que consiguen un mayor nivel de atención en los alumnos y utilizarlas en los momentos claves, como al final de la clase, cuando están, en general, más cansados.

Por otra parte, Isabel Orjales, doctora en Pedagogía, señala en su manual para padres y educadores ‘Déficit de atención con hiperactividad’ diferentes tácticas para mantener el nivel de atención individual de los alumnos con este trastorno, pero que pueden utilizarse con estudiantes que denotan en el aula falta de interés y exceso de distracción. La base fundamental es conseguir que este alumno participe en el aula: sacarle a la pizarra o hacerle preguntas frecuentes y fáciles para favorecer su dinamismo en clase. Para conseguir atraer su atención y evitar que se disperse es recomendable acercarse a su mesa y continuar allí la explicación, o bien apoyar la mano en su hombro mientras se expone al resto de los estudiantes.

Consejos para educadores de niños distraídos

En el aula:

    • Establece rutinas y expectativas claras: Los niños distraídos se benefician de saber qué esperar y qué se les pide. Crea un ambiente de aprendizaje estructurado con reglas y normas consistentes.
    • Capta su atención: Comienza las clases con actividades dinámicas o atractivas. Usa recursos visuales, juegos y movimiento para mantener su interés.
    • Divide las tareas en partes pequeñas: Las tareas largas y complejas pueden ser abrumadoras. Divídelas en pasos más manejables y establece metas alcanzables.
    • Proporciona descansos frecuentes: La capacidad de atención de los niños es limitada. Permite descansos cortos para que se muevan y liberen energía.
    • Utiliza estrategias de refuerzo positivo: Recompensa la atención y el esfuerzo con elogios, pegatinas o pequeñas actividades gratificantes.
    • Ubica al niño estratégicamente: Siéntalo cerca del profesor o en un lugar donde haya menos distracciones.
    • Ofrécele opciones: Permite al niño elegir entre diferentes actividades o materiales para que se sienta más involucrado en su aprendizaje.

En casa:

    • Crea un espacio de trabajo adecuado: Busca un lugar tranquilo, libre de distracciones, con buena iluminación y ventilación.
    • Establece una rutina de estudio: Define un horario regular para las tareas y asegúrate de que el niño tenga todo lo que necesita a mano.
    • Evita las interrupciones: Apaga el televisor, los teléfonos móviles y otros dispositivos electrónicos durante las tareas.
    • Divide las tareas en partes pequeñas: Al igual que en el aula, divide las tareas largas en pasos más manejables.
    • Utiliza temporizadores: Establece temporizadores para ayudar al niño a controlar el tiempo y mantenerse enfocado.
    • Fomenta la organización: Ayúdale a organizar sus materiales de estudio y a crear un sistema para recordar sus tareas.
    • Sé paciente y comprensivo: La falta de atención puede ser frustrante para el niño. Sé paciente y comprensivo, y celebra sus logros.

Este contenido ha sido publicado originalmente por Padres e Hijos en la siguiente direcciónpadresehijos.com.mx

ENLACE DE LECTURA: CÓMO TRABAJAR CON NIÑOS QUE PRESENTAN ATENCIÓN DISPERSA



Comparte este artículo
comentarios 1
Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

También puede leer:





Se desactivó la función de seleccionar y copiar en esta página.